La pared. El famoso recurso que el gobernador le quiere entregar por la construcción de los hospitales generales en Sinaloa a empresarios cercanos, uno al empresario periodístico Mario Vázquez Raña y el otro a Carlos Salinas de Gortari, puso en alerta roja a los legisladores.

El que sí nos sorprendió, fue el mismo presidente de la comisión de Salud del Congreso de Sinaloa, Víctor Díaz Simental, que ya se subió al ring pero para justificar que los hospitales de primer mundo tienen que garantizar los servicios de salud a los sinaloenses carentes de recursos.

Hay que señalar que el posicionamiento de legislador fue en tribuna y no se lo mandó decir a Jesús Enrique Chávez Hernández que ya casi pedía un tanque de oxígeno por el ?mimisqui? que le andaba dando por semejante atrevimiento.

La cuestión aquí es que esto es lógico, a ?Chuquiqui? no le va a tocar ver que el gobierno del estado salde esa deuda en 25 años, por eso es que le importa un sorbete qué es lo que está pasando en este lado y lo que vaya a suceder.

Él tiene la chamba de sacar los dos decretos adelante, cueste lo que cueste. El problema, querido lector es que los hospitales de Mazatlán y Culiacán ya se están socializando demasiado y de aprobarse esto traería serias consecuencias con la sociedad.

Las reacciones serían distintas a lo de la ley mordaza, porque ahora no estaría involucrado de manera personal los medios de comunicación en Sinaloa, pero al menos, creo que la sociedad es muy distinta a la prensa de provincia.

Vienen tiempos distintos, no creo que los legisladores se hayan expuesto a criticar este procedimiento del estado que dejaría una ganancia a las de por si ya acaudaladas empresas nacionales que se ?echarían? ese trompo a la uña.

Con ese margen de ganancia, si tuviera los recursos, yo también me aventaba a echarme un hospital en Sinaloa. Por eso es que ahora se presume que Sinaloa es líder nacional en inversiones, pues cómo no, si aquí el que pone un peso obtiene 100 de ganancia, eso sí es negocio.

Debemos destacar que en este caso los legisladores, Jesús Burgos, Sandra Lara, Fernando Pucheta, Martín Pérez y ahora se nos integra a la lista Víctor Díaz Simental, que insisto me tiene con la boca cuadrada, lo bueno que ya carburó.

Revire. Luego de que el gobernador de Sonora, Guillermo Padrés Elias, expulsara a tres delegados federales de su estado, la presidencia de la República le reviró el cuestionamiento por los daños ecológicos ocasionados por el Grupo México.

A pesar de que el procedimiento legal sigue por parte de la Profepa continúa y se avisa que hay demandas penales en contra de esta compañía minera, el mandatario se desesperó y tomó esa medida para retar al gobierno que pusiera atención en esto.

Pero ahora resulta que la Conagua anda queriendo desaforar a Padrés Elías por la construcción de un pozo en alguno de sus ranchos por no haber realizado los procedimientos legales que le corresponden.

Aquí la puerca torció el rabo y estamos seguro que al mandatario sonorense, por andarla haciendo ?de jamón? le va a salir el ?tiro por la culata?, y de esos rollos se encarga el gobierno federal.

Los delegados se quedan, el presidente de México los respalda, y Padrés Elías se puede quedar sin chamba por andarse poniendo con ?Sansón a las patadas?.

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