Entrevista con Federico Berrueto, politólogo y director de la casa encuestadora Gabinete de Comunicación Estratégica.
SDP Noticias: A la pregunta de Federico Arreola de qué pensabas de Rius, respondiste que educó tanto como Vasconcelos e hizo más política que cualquier candidato presidencial. ¿Realmente piensas eso?
FB: Sí, y creo que me quedo corto, puedo agregar que influyó más que cualquier periodista o conductor de televisión de hoy día.
Como todo, hay un gran momento en la producción editorial de Rius. Ahora lo vemos muy lejano y para algunos irrelevante; pero un mérito suyo fue el ejercicio de la libertad, ejemplar en un sistema político intolerante y represor. Sus ideas progresistas y sobre todo no alineadas a la iglesia. Rius nunca se quebró y en perspectiva es una lección cívica muy meritoria.
Muchos proyectos editoriales de las últimas décadas de siglo, críticos y de izquierda, se daban en el marco de la democracia cristiana o de plano muy en el marco de la religión. No era malo, pero también la Iglesia merecía escrutinio. Como nadie, Riuz lo hizo y a todos pasó a la báscula.
SDP Noticias: Se le critica que sus ideas también eran estalinistas, ¿así lo ves?
FB: Es la época. Simpatizar con el Partido Comunista Mexicano, como fue su caso y el de muchos, pudo llevarles a una visión complaciente respecto al totalitarismo soviéticoo, lo que ahora muchos repudian de Cuba. Esto no demerita lo que importa, su crítica al poder en su conjunto, por igual gobierno, partido, oligarquía, Iglesia.
Hay que recordar que el PCM estaba proscrito. Rius es genial en tres sentidos: primero, el contenido de su crítica al poder; segundo, la forma, hacer de la historieta un instrumento de educación política progresista y, tercero, el éxito editorial, esto es, que su trabajo editorial, ideológico y político fuera de interés público, que la gente pagara por leerlo.
SDP Noticias: ¿Qué tan popular fue?
FB: Su producción es muy variada. Para mí, como muchos de mi generación, sus historietas fueron una manera para entender muchos temas, particularmente los de la política. Mi recuerdo es que su trabajo era influyente y memorable, entretenía y formaba, sus tesis eran objeto de comentario en la escuela, el café o la conversación cotidiana. Sus personajes fascinantes y con un muy poderoso mensaje simbólico, además de lo que nos decía el texto. Lo tengo muy presente en la época de Los Supermachos, que se dice que tiraba 250 mil ejemplares semanales, que para la época es como si fueran 750,000 hoy día. Se dice que por presiones políticas al editor se cerró la producción para dar lugar a Los Agachados, también muy popular.
Después le dio por participar en otros proyectos editoriales, e incluso escribió varios libros en formato de historieta. No sé qué tan exitoso haya sido, lo que sí es un hecho es que fue muy influyente en la formación política de muchos mexicanos.
SDP Noticias: ¿No crees que utilizar el proyecto editorial con propósitos de adoctrinar se aleja del periodismo?
FB: No. El periodismo en todo el mundo y el mexicano por excelencia se ha iniciado con pretensiones políticas y en muchos casos de crítica al poder. Es legítimo y es el receptor del mensaje el que tiene la última palabra, más cuando lo que se recibe se paga.
No creo en el periodismo “neutral” “objetivo” o “imparcial”. Es un terreno que resulta con frecuencia inhóspito si no es que tramposo. El periodismo y la historieta van de la mano en cuanto a estándares, entre éstos, el apego a la verdad. La interpretación puede ser parcial, la valoración de los hechos de acuerdo a la postura del escritor, pero debe haber apego a la verdad. No estoy de acuerdo con el periodismo militante en el sentido de alterar los hechos e interpretar maniqueamente la realidad. No creo que Rius se correspondaa este último perfil.
SDP Noticias: ¿Sería exitoso en el México de hoy día?
FB: Lo dudo. Aunque la cultura popular del mexicano persiste apegada más a la imagen que al texto. La historieta es esto, o más bien es una síntesis de texto con imagen. La caricatura es más imagen y menos texto y no hay propiamente historia, sino fotografía.
México tiene una espléndida tradición de caricaturistas, ingeniosos, amenos, inteligentes, creativos, no así lo vemos con el género de la historieta. Subsiste pero no en los términos que Rius acometió su trabajo político y editorial.
SDP Noticias: ¿Cómo se debería homenajear a Rius?
FB: Hay que preservar su obra. El Estado debiera promover un documental sobre su obra y vida ahora que se pueden rescatar muchos testimonios. La otra manera de honrar su memoria, para quienes tenemos que ver con la labor de comunicación, debemos saber que hemos llegado hasta aquí porque muchos como Rius tuvieron los arrestos para desafiar al sistema y que jamás se doblaron ni se sometieron. A Rius hay que verlo como uno de los arquitectos del México de hoy día en lo mucho bueno que tenemos.