Esta madrugada, el Senador emecista favorito de las redes sociales anunció su “renuncia” en un post de Facebook que posteriormente fue aclarado en un video por él mismo alegando un hackeo.

El post marcaba diferencias entre él y Luis Donaldo Colosio Riojas. Pero la “renuncia” no fue un hecho aislado, más bien, pareció la respuesta impulsiva a la carta pública enviada por Luis Donaldo Colosio Riojas en la que, a tono de reproche amable pero concienzudo, hizo desde el escándalo que protagonizó por ser machista contra Mariana Rodríguez, su esposa, cuando le criticó entre líneas el “ estilo de vida muy expuesto” que decidió llevar.

Samuel García ha demostrado ser, además de macho, impulsivo, una característica peligrosa en la personalidad de cualquier político. Después del escándalo del “live” con las alitas de pollo, García pretendió lavar su imagen compartiendo una fotografía suya planchando.

Se dice en Nuevo León que el llamado de atención, ahora sí, directo, fue para que Samuel moderara su interacción en redes sociales y dejara de exponerse como cada semana, a la polémica y la viralización, pues aunque definitivamente, a Samuel se le conoce cada vez más, la opinión negativa que genera su comportamiento no le deja un buen antecedente para sus aspiraciones, ni para Movimiento Ciudadano y mucho menos para Luis Donaldo Colosio Riojas, que cada vez, marca más la línea de García. Después de todo, mucho le ha costado mantener durante toda su vida un perfil bajo, serio y constante como abogado de la mano con su gran amigo, Basave, como para que en el 2021 se le encasille como “junior” por culpa del senador.

El tema es que al propio Dante Delgado le ha cansado ya el desgaste que Samuel García representa para Movimiento Ciudadano, pues atrás de sus polémicas redes y videos, hay un senador que con el apoyo político para despuntar, se ha dedicado a taladrar su imagen con escándalos, impulsos y hasta “errores” que cobran factura. Su candidatura ya se saló, y aunque lograra tener el apoyo de los zares empresarios del norte, en su propio partido ya se duda de que en vez de sumar, postularlo les salga más caro simbólicamente.

Ahora sí, el Senador García debería atender los consejos de Javier Duarte: “Paciencia, prudencia, verba contingencia, dominio de ciencia. Presencia ¿o ausencia? Según conveniencia.” Principalmente, verbal contingencia.