No vamos a permitir ningún acuerdo que se construya sobre el pantano, la inmundicia de un fraude electoral. Con estas palabras, Andrés Manuel López Obrador rechazo tajantemente la posibilidad de formalizar algún tipo de consenso con sus adversarios para dar por aceptada su derrota en los pasados comicios electorales.

Durante una asamblea informativa en la ciudad de Puebla, el líder social afirmo que, más allá de la posibilidad de dar por hecho el triunfo de Enrique Peña Nieto en la silla presidencial, existen numerosas pruebas como para que el TEPJF eche para abajo todo el proceso electoral que la coalición Movimiento Progresista impugno ante la instancia.

Día con día, los mismos simpatizantes de AMLO han ido enriqueciendo el número de presuntas pruebas para que los representantes legales de la coalición puedan presentarlas como evidencias supervenientes ante la sala de los magistrados electorales que tienen la encomienda de evaluar las elecciones presidenciales del pasado 1ro. de julio.

Incluso, durante el mismo mitin en el que el tabasqueño hizo estas declaraciones, algunos de los asistentes entregaron más pruebas de la supuesta operación priísta de compra y coacción del voto en la entidad.

Con lo anterior, López Obrador manifestó que, Peña Nieto no se va a poder sentar en la silla presidencial porque no lo quiere el pueblo de México.

La cuestión que surge en este contexto es: ¿Qué llevo a Andrés Manuel a omitir los, poco mas de 19 millones de votantes que sufragaron a favor de la coalición Compromiso por México, más allá de si unos pocos millones de estos lo hicieron comprados y sin convicción?

AMLO no ha medido el impacto mediático, y negativo para su cruzada, que pudieran tener este tipo de declaraciones, tomando en cuenta que los medios de comunicación tradicionales y masivos han usado estas con el fin de denostar su imagen y la de sus simpatizantes.

Tampoco se trata de ignorar la voluntad popular de quienes vieron, en el candidato del PRI, a su futuro Presidente y votaron por él convencidos realmente de ello.

Lo cierto es que, según los códigos legales que rigen en materia electoral a nuestro país, de comprobarse las denuncias presentadas de un probable rebase a los topes de campaña durante el proceso electoral reciente, el TEPJF bien pudiera no dar por válido el mismo y, en el peor de los escenarios, el PRI perdería el registro como organismo político ante el IFE.

En este sentido, López Obrador informo que su Movimiento posee información que vincula el uso de 5 millones de tarjetas telefónicas con un saldo de 100 pesos cada una. Dicho de otro modo, la suma del crédito en todas las tarjetas da un total de 500 millones de pesos; lo cual rebasa, y por mucho, los 336 millones de pesos del tope de gastos de campaña de la coalición conformada por el PRI y el PVEM, que postulo al ex Gobernador mexiquense rumbo a la Presidencia de la República.

Tinterazos:

1. Rechazo. El IFE desecho las denuncias presentadas por Soriana y Monex en el tema de la suspensión del spot: Miles de pruebas del fraude 2012, en el que el Movimiento Progresista pone en evidencia a dichas empresas en la ejecución de prácticas que condujeron al presunto fraude en la elección presidencial.

2. Beltrones. El líder parlamentario de la bancada del PRI en el senado, Manlio Fabio Beltrones, dio a conocer un comunicado en el que afirmo que el TEPJF emitirá la declaratoria que confirmará como Presidente electo a Enrique Peña Nieto; lo hará antes, incluso, del 6 de septiembre.

3. Medallero. China vuelve a la cabeza del medallero olímpico teniendo en su haber 30 preseas doradas, 17 de plata y 14 de bronce; los EUA poseen la segunda plaza con 27 medallas de oro, 14 preseas de plata y 15 de bronce. La sorpresa la viene dando el anfitrión UK, al colocarse ya en el tercer sitio con 16, 11 y 10 respectivamente. A la delegación mexicana le cayó un bronce más en manos de la clavadista Laura Sánchez. Día 10.