Frente a la respuesta de Andrés Manuel López Obrador en su conferencia mañanera sobre la intervención del Ejército en casi todas las actividades de la vida pública que corresponden al gobierno civil, se desató una polémica respecto a si estamos viendo un “gobierno fallido” o peor aún, un “Estado Fallido”.

En un sentido amplio, cuando se habla de un “Estado fallido” se refiere a un Estado que se ha hecho ineficaz, que tiene sólo un control nominal sobre su territorio, en el que existen grupos armados (e incluso desarmados) desafiando directamente la autoridad del Estado que no hace cumplir sus leyes debido a las altas tasas de criminalidad, a la corrupción extrema, a un extenso mercado informal, a una burocracia impenetrable, a la ineficacia judicial y a la interferencia militar en la política.

 

“A confesión de parte, relevo de pruebas”

Partiendo de estos conceptos y de las críticas que se han dado a los gobiernos que antecedieron a AMLO, la situación actual es aún peor -y no dicho por los intelectuales que tanto cuestiona AMLO- sino descrito claramente por el propio presidente de la República, quien confiesa tácitamente el fracaso de su gobierno.

Qué le preguntaron a AMLO: Presidente, pues llama la atención que el Ejército construya un aeropuerto, que el Ejército controle la seguridad del país, que el Ejército intervenga ahora en las aduanas y que incluso se haga cargo del avión presidencial.

 

¿Se ha convertido al Ejército en el principal aliado de la Cuarta Transformación?

Con su respuesta el presidente reconoció laincapacidad de su gobierno para atender las tareas de seguridad pública, combate a la corrupción, desarrollo de infraestructura, entre muchas más.

Respecto a la seguridad pública que corresponde al gobierno federal y a los gobiernos estatales y municipales, AMLO respondió:

«Nos ayudan en la seguridad pública porque es un problema que tenemos que enfrentar y garantizar la paz. Antes no era así, no se le permitía al ejército hacer funciones de seguridad pública; ahora el Ejército nos está ayudando, lo mismo que la Marina.

Y se está creando de manera conjunta la Guardia Nacional, que se está conformando con marinos, con soldados y con los policías federales de la antigua Policía Federal; ya hay más de 90 mil elementos de la Guardia Nacional y es con la disciplina, con el profesionalismo del ejército y lo necesitábamos.»

Hay que recordar que durante sus más de 18 años de campaña cuestionó que el Ejército asumiera funciones de policía y cuestionaba a Calderón y Peña por involucrar a esas instituciones en las labores de seguridad pública. ¿Qué pasó?

Sobre la construcción de obra pública, AMLO comentó: Nos están ayudando también, en efecto, en la construcción de obras públicas, porque fue un desastre todo lo relacionado con la construcción de las obras públicas durante el periodo neoliberal, se dedicaron a robar, empresas contratistas que cobraban el doble, el triple o más por las obras, que nos las terminaban, hacían su agosto tanto empresas contratistas de México como del extranjero.

Entonces qué pasa con la SCT, con la Función Pública, con Banobras y con todas las dependencias que ejercen presupuesto de obra. ¿No lo pueden controlar? ¿No pueden ejercer transparentemente las obras?

 ¿Es tan ineficiente el gobierno, que tiene que recurrir al Ejército?

También agregó:

«Imagínense, si no contamos con el apoyo de los ingenieros constructores del Ejército... En el caso del aeropuerto nos vamos a ahorrar 275 mil… no, 225 mil millones de pesos, porque lo está haciendo el Ejército, porque iba a costar 300 mil millones el de Texcoco y ahora nos va a costar 75 mil el ‘Felipe Ángeles’ y se va a terminar el 21 de marzo del 2022; y el de Texcoco, si salían las cosas bien, lo íbamos a inaugurar, bueno, hasta el 2025, ya no íbamos a estar nosotros, y eso quién sabe porque se hundía cada vez más. Entonces, ¿cómo no agradecerles a los ingenieros militares?»

En el caso de Aduanas intervienen, dice, porque imperaba la corrupción en las aduanas. Entonces, estamos poniendo orden en migración, en aduanas, en puertos, desde luego en el SAT y nos faltan otros asuntos que se van a atender, pero vamos a limpiar de corrupción.

Con Pemex, lo mismo: Se tomaron las refinerías. Porque era una pantalla, no sólo eran tomas clandestinas, eso era un distractor, la mayor cantidad de gasolina salía de las refinerías en pipas, estaban tomadas las refinerías por la delincuencia en contubernio con las autoridades.

Lo manifestado por AMLO en su conferencia mañanera del 29 de julio refleja un gobierno incapaz de actuar que tiene que recurrir y distraer a las fuerzas armadas -a sus cúpulas- de las actividades que le confiere la Constitución para dedicarse a asuntos en losque el gobierno se ve incapaz.

 

El “gabinetito”

Irma Eréndira Sandoval al frente de la Función Pública ha demostrado total incapacidad para investigar y fijar controles para evitar la corrupción y otros funcionarios públicos, que al parecer no tienen la suficiente capacidad, como Javier Jiménez Espriu, quien renunció por supuestamente no estar de acuerdo con la militarización de Puertos y Fronteras, pero, según lo dicho por el presidente, había demasiada corrupción.

Es decir, Jiménez no fue capaz de evitar y combatir la corrupción y entonces se tuvo que recurrir al Ejército.

Estamos ante un posible Estado Fallido, en que el gobierno no está pudiendo con la responsabilidad de gobernar.

Quedan dos caminos, la militarización paulatina de las funciones públicas, como está sucediendo, o un problema de ingobernabilidad que, en la mayoría de los casos, termina en un Golpe de Estado.

La 4T desafortunadamente está resultando un verdadero fracaso y la gobernabilidad cada vez será más crítica