Hace unos años se pensaba que una mujer estandarizada como “buena” debería medir 90-60-90, con el tiempo y con la llegada de las “gordibuenas” dicho estándar se convirtió en sólo un mito.

 

Hay diferentes maneras para que luzcas “buenona”.  Primero debes detectar cuál es tú atractivo y ponerlo a funcionar.  No necesariamente debes de tener “de todo” para lograr el objetivo, puedes tener buena pompa, buena “bubi”,  piernona, caderona, ancha, flaca, gordita;  todo es aprovechable.


¿Qué deporte me pone buenota?


La natación es uno de los deportes más completos, muchas mujeres dicen que te vuelves “espaldona” pero está comprobado que practicar natación tonifica tu cuerpo y trabajas TODOS los músculos.


Correr o trotar, además de ser un deporte desestresante también te ayuda tonificar las piernas y la pompa, es uno de los ejercicios donde quemas muchas más calorías, mejora el metabolismo, te da un mejor aspecto físico y mejora tu estado de salud en general.


Inscríbete a un “gym” dile al entrenador exactamente qué es lo que te gustaría trabajar, lo que quieres bajar o subir, aumentar, etc. ellos sabrán instruirte y llevarte por el camino correcto y lograr el objetivo de verte buenerrima.


Consumir menos calorías.

 

Bebe mucha agua.

 

Diseñar un buen plan de alimentación.

 

Mantener una perspectiva mental positiva.

 

Ponerse “buenota” es algo que se logra con mucha paciencia y dedicación, pero sobre todo mucho esfuerzo.

 

Existen muchas maneras para poder verte realmente “buena”  recuerda que lo más importante es tener buena salud,  raramente la cara no entra en el concepto de “buena”.

 

Las medidas de la mujer perfecta se deberían  medir con los sentimientos y la inteligencia, recordando que no debes abandonarte ni fondonguear por la vida.

 

El objetivo de la mujer “buenona”: estar como Santa Elena “cada día más buena” o como Santa Eduviges “buena por donde te fijes”.