Hasta el 25 de enero de este año, al Instituto Nacional Electoral le llegaron 52 solicitudes de diferentes organizaciones para constituirse como partidos políticos. Según la Ley General de Partidos Políticos, las organizaciones que quieran su registro deben de notificar su intención ante el INE en enero del año siguiente al de la elección presidencial. Los casos más interesantes son los de Margarita Zavala y Elba Esther Gordillo.

Elba Esther Gordillo

Con una base formada por maestros, médicos, jubilados y campesinos, la organización Redes Sociales Progresistas cuenta con alrededor de 260,000 afiliados en todo el país. Esta agrupación apoyó la campaña de López Obrador y es dirigida por el Fernando González, yerno de Gordillo y por el nieto de la maestra Elba Esther , René Fujiwara.

En su primera convención nacional más de 1,100 de sus delegados alzaron la mano para que esta organización busque constituirse en partido político. Negaron que vayan a convertirse en un “partido satélite” de Morena y buscan convertirse en “la gran auditoría social que el gobierno de López Obrador requiere”, según señalaron los coordinadores de RSP.

Margarita Zavala

Libertad y Responsabilidad Democrática Libre, busca ser un nuevo partido político. La organización civil de Margarita Zavala también busca convertirse en un partido político. El nombre del partido sería México Libre. Curioso es que Zavala había declarado que su asociación política no se convertiría en un partido político.

Con la experiencia de candidato independiente de Margarita Zavala, ella está buscando que su partido sea la opción para los ciudadanos que tienen el deseo de participar en la vida política del país pero que no encuentran opciones para lograr su deseo.

Zavala afirmó que México Libre no impulsará su candidatura en futuras elecciones, entonces entendemos que si se llega a lograr el registro de México Libre como partido político, no habrá campaña para Zavala 2024.

Los otros 50

Las demás organizaciones, redes, movimientos tienen diversos nombres y objetivos. Algunos regionales, otros racionales.  Algunos demócratas, otros republicanos, otros tantos socialistas. Muchos movimientos indígenas y campesinos, otros que en su nombre tienen su intención como el que se llama “Verdadera Alternativa para Mejorar y Organizar a la Sociedad”.

¿Cuántas de estas organizaciones se quieren organizar para ser un verdadero partido político? ¿Cuántas de estas organizaciones solo buscan vivir del presupuesto que se les asigna a los partidos políticos?

¿Capitalización del Antipejismo?

Dice Martha Anaya en su columna de El Heraldo de México que muchos de los partidos políticos que buscan su registro buscan capitalizar el sentimiento que hay en contra del ganador de las elecciones para presidente del pasado mes de julio.

Con números de aceptación bastante altos, es una labor que considero complicada. Al menos en el momento actual donde lo que hace el presidente López Obrador hace que los que lo apoyan lo apoyen aún mas y que sus detractores busquen nuevas maneras de descalificarlo.

Pulverización

Imagine usted, si solo con 4 candidatos, el voto se pulverizó, qué será con 5 , 6 o 10 opciones. El que gana siempre en estos casos es el partido de la mayoría y ahora es Morena. ¿Le conviene a Morena que existan más partidos políticos? Hoy en día sí, pues es el partido fuerte y de mayoría en el país. Muchos partidos disminuirían la oportunidad de que alguno de ellos pueda ser el verdadero partido de oposición pues la oposición sería la suma de todos los demás, pero esa suma no suma para ganar una elección.

¿Y los partidos tradicionales? Pues esos se tendrán que reinventar si buscan llegar a figurar en las siguientes elecciones. Sus maquinarías tendrán que modificarse y cambiar para poder volver a ser una opción válida para los que reniegan de éstos.

Esperemos a finales de mes para ver cuántos de estos nuevos partidos logran su registro. De estos se tendría que analizar cuantos son una opción real y cuántos solamente buscan aprovecharse del registro y recibir algo del presupuesto destinado para los partidos políticos.