Por ser considerada “subversiva”, la ejecución en la guillotina fue la respuesta que en Francia en 1793, Olympe de Gouges obtuvo después de alzar la voz para reclamar para las mujeres los mismos derechos obtenidos por los hombres.

Hoy por hoy la paridad de género en nuestra legislación es una realidad. La reforma político electoral aprobada por el Congreso de la Unión en diciembre de 2013 permitió conforme la adición que se hiciera en el artículo 41 de la Constitución, que a partir de la elección de 2015, los partidos políticos postularan en candidaturas por igual a mujeres y hombres. De esta forma se ha logrado que actualmente el número de diputadas en San Lázaro sea histórico. Sin embargo cuantitativo no debe ser únicamente la vara con la que se mida la participación de este gran número de mujeres, sino también cualitativa para avanzar en la merma de la brecha de desigualdad.

La historia reciente de la participación política de las mujeres ha transitado de las cuotas a la paridad, este tránsito no ha sido del todo voluntario ni miel sobre hojuelas para los partidos políticos que se resisten a ceder los espacios de poder que históricamente han detentado los hombres.

Y como lo señalé en mi columna anterior, si bien es cierto este es un proceso que debemos de recorrer para el logro y consolidación de la igualdad entre mujeres y hombres, también es cierto que nada garantiza que la mujer sea mejor por ser mujer y que el hombre sea un mal candidato o mal gobernante por el hecho de ser hombre.

Hay quienes dentro y fuera de los partidos políticos y de las cúpulas del poder dicen que la paridad que permitirá en mayor medida el acceso de las mujeres al poder es un riesgo, ya que “algunas mujeres” no están preparadas para ser candidatas o gobernantes, sin embargo  pregunto: ¿Todos los hombres que han sido gobernadores y presidentes municipales han estado pulcramente preparados? ¿Han tenido un excelente desempeño? ¿Se ha cuestionado acaso que por ser hombres no están preparados aun para gobernar? Estoy segura que la respuesta categórica es “no”. Y es aquí cuando surge una duda lógica: ¿Por qué entonces cuando se trata de mujeres el tema de “si están preparadas” se convierte en un punto de definición en las decisiones?

A tanto ha llegado esta duda que en la elección del año 2012; el PAN, el PRI y el partido Verde fueron legalmente obligados a cumplir la cuota de género. En ese entonces los 3 partidos alegaron imposibilidad para presentar a mujeres como candidatas, motivo por el cual el IFE hoy INE, al ver la desargumentada imposibilidad de los partidos y al cierre del registro de candidaturas, les concedió 48 horas para que hicieran lo imposible, es decir, encontrarán y registraran a mujeres candidatas en la proporción 40/60% ordenada por el órgano judicial electoral. Si no lo hacían, simplemente las candidaturas a cargo de hombres que inicialmente habían presentado no serían registradas, ¿Y qué creen? Sí hubo mujeres que registraron como candidatas, como por arte de magia tanto el PAN, el PRI como el Verde encontraron y registraron a las mujeres.

Este año en Baja California se realizarán elecciones locales que definitivamente tendrán la connotación de histórica, ya que por primera vez deberán de aplicar no sólo la reforma constitucional federal; además de la constitucional y legal que hiciera la legislatura local, sino que también deberán aplicar una serie de criterios y resoluciones judiciales que han derivado de un gran número de impugnaciones judiciales resueltas durante 2015 en materia de paridad vertical y horizontal.

Es así que derivado de las impugnaciones que se presentaron en el Estado de México, Nuevo León y Morelos, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, ordenó observar la paridad horizontal en la integración de ayuntamientos, lo cual significa que la mitad de las candidaturas a presidencias municipales, deben ser mujeres, pero eso no es todo, la autoridad jurisdiccional también resolvió que cuando el número de municipios sea impar, el número adicional corresponderá a una mujer. Aplicando este criterio en Baja California, significa que los partidos y coaliciones deberán postular a mujeres en 3 de los 5 municipios.

Respecto la paridad vertical también  hay criterios judiciales importantes, estableciéndose que en las planillas para presidencias municipales, los número nones corresponde a mujeres y los pares a hombres.

Así que ahora no podrán alegar imposibilidad, la participación de las mujeres debe ser una realidad que acaten los partidos, quienes deberán entender, comprender y asimilar que la participación de la mujeres en la toma de decisiones de la vida pública de nuestro país significa no una concesión sino el reconocimiento de derechos históricamente negados.

Que nada nos asuste, que nada nos espante, las mujeres han llegado a la política para quedarse, para dar pasos firmes y decisiones sostenibles. Las mujeres hoy están siendo llamadas a tomar en la política mexicana una posición responsable y comprometida, esa que hace falta y le urge a este país. Y mientras esperamos para encontrarnos en la lectura de la semana entrante, les invito a la reflexión con la frase del Ex Secretario General de las Naciones Unidas, Boutros Boutros-Ghali: “La humanidad posee dos alas: una es la mujer la otra es el hombre. Hasta que las dos alas no estén igualmente desarrolladas la humanidad no podrá volar. Necesitamos una nueva humanidad, necesitamos volar”.

Twitter: @mujeporlapaz