Preguntar al pueblo bueno no siempre es lo mejor, suena tan bien, tan incluyente pero lleva mucho riesgo. 

La cuestión es que hay expertos en cada tema y es a ellos a quienes se debe consultar, es como si tuviera alguna enfermedad y se pusiera a consulta social que tratamiento es el adecuado para la cura, es absurdo. Quienes deben de aplicar el tratamiento son los médicos en este tema específico. 

El pueblo bueno podrá ser muy bien intencionado pero nadie sabe todo ni es experto, someter la vida pública del país a consulta no es lo más sabio hay mucho riesgo en ello por nuestra propia ignorancia en temas tan técnicos y especializados. 

El presidente electo debe aprovechar la legitimidad con la que llega para tomar las mejores decisiones no es necesario estar consultando todo.