Desde que el internet se creó, se inició una batalla por la privacidad. Primero hubo escándalos por la manera más simple por la que podíamos comunicarnos a través de una nueva herramienta: el correo electrónico.
El correo electrónico fue la primera forma de comunicación electrónica, aunque no todos sabían cómo usarla durante mucho tiempo se impuso como el rey de la comunicación; aún en la oficinas donde hacer una llamada era más fácil, se enviaban mail para preguntar todo…¿Ya te fuiste de la oficina?.. como subjet, aún cuando era más fácil saberlo si te levantabas de tu lugar o si agarrabas el teléfono para preguntar, pero no. Mandabas un mail.
Podías abrir uno, tres, cinco, mails de Hotmail, por ejemplo, o de varios operadores sin dar más datos que tu nombre y se acabó, nadie hacía preguntas, nadie necesitaba nada más. El problema fue cuando empezaron a Hackear mails en el mundo financiero y político, así empezaron a aumentar los controles hasta que ahora tales controles son más o menos buenos, porque con tu teléfono celular, se cruza con el nombre que has dado en la compañía telefónica y a su vez a tus datos bancarios.
Después del correo se empezaron a masificar los salones de chat; durante años ponías incluso un “nickname” y ya, así había hombres que se decían mujeres o mujeres se hacían pasar por hombres. En estos chats privaba el anonimato, había gente que entraba a desquitar sus más bajas pasiones escribiendo en mayúsculas groserías e insultando a todo el mundo.
Recuerdo un capítulo de “Malcomn in the Middle” donde uno de los niños engaña a un incauto en un chat haciéndose pasar por una bella mujer y pidiéndole que le comprara un pasaje de avión a su nombre, sólo para reírse al llegar al aeropuerto viéndolo cargar con una pancarta escrita con un nombre ficticio y unas flores.
El problema de los Chats es que muy pronto se llenó de estafadores de verdad que no sólo se reían de los incautos, sino les robaban el dinero, aunque era el paraíso de negocios como la prostitución, en estas salas se habló hasta de secuestros. Poco a poco, estos chats anónimos dejaron de ser populares, aunque aún hoy hay personas que los usan, sobre todo personajes de otra época, para verlo sólo hay que ir aquí: http://www.elchat.net/chat1/.
Pronto, muy pronto las compañías se dieron cuenta de que el anonimato era un problema en el ciberespacio, así que el primer chat que se oficializó con algún tipo de identidad fue el Messenger, que era apenas un guiño a alguna certeza pues como ya dije, abrir un mail de Hotmail era tan fácil como inventarse un nombre. Pero el Messenger tenía cierta magia, poco a poco fue ahí donde se popularizaron los primeros emojis y donde se formaron los primeros grupos, sobre todo públicos.
Así podías entrar a grupos donde te vendían de todo y se intercambiaba de todo y donde por supuesto también algunos se inventaron algún tipo de fraude.
El siguiente paso fue el famosísimo BlackBerryMessenger; este chat tenía dos ventajas, sólo lo tenías si eras usuario de ese teléfono y además te asignaba un PIN que te identificaba con tu nombre y número de teléfono. El plus era que el sistema de encriptamiento era poderoso y todos confiábamos en él. ¿Qué pasó? Obvio lo terminaron hackeando.
Por esa época surgió la primera red social: Twitter. Todo el mundo se volvió loco con él, la vida en 140 caracteres, ahora en 280, los mexicanos fieles a su tradición conservadora siguen usando el twitter como una herramienta de comunicación, aun cuando en el mundo es una de las redes menos usadas, eso habla mucho de nuestra necesidad de aferrarnos a un estilo de vida.
Cuando estaba en su mejor época el BBM, la llegada del sistema Android le dio la oportunidad al Whatts app, hoy es el chat más usado en el mundo, sigue teniendo como base el número de teléfono que se liga a la tarjeta de crédito que pusiste cuando contrataste tu plan, pero tiene algunas fallas, pues cualquiera puede comprar un chip y ponerse un número anónimo y en realidad no sabes con quien estás hablando.
La red social que ha abarcado todo es el Facebook, para saber de su dueño Mark Zuckerberg sólo hay que ver su película: “La Red Social” donde a través de esquemas robotizados de inteligencia artificial que miden todo, integran todo y se meten en tu vida privada desde el primer momento.
Esta poderosa herramienta ha servido y muy bien para empresas que comercializan un montón de cosas, desde libros, pasando por la prostitución hasta la venta de hamburguesas, es la número 1 en el mundo. Hace poco me pidió que cambiara mi perfil a mi nombre real, confieso que no supe cómo explicarle que trabajo con un alias y fracasé. Lo que si no quise perder es mi cuenta personal y tuve que hacerle unos cambios, aunque sospecho que ya sabía quién era, porque tiene cruzados todos mis datos bancarios, telefónicos, del mail, en fin Facebook por supuesto sabe quién soy.
Y también Cambridge Analytica y quizá otras empresas a las que ya vendieron mis datos, además de posibles maleantes que sepan que me gustan las hamburguesas, mi afición por los video juegos y un largo etcétera.
Yo ya sabía que un día iban a Hackear Facebook, pero me gusta enterarme de las cosas de algunos amigos, de algunas amigas, de mi sobrino, de mi esposa con un solo vistazo, lamento mucho que mi información no sea segura, pero ya sabía que nunca lo ha sido, menos en México y ahora descubro, tampoco en otros países. Lo único que me queda es esperar que yo, no sea atractivo para un delincuente. O a lo mejor sí….