“No me asusta el descenso”. Oribe Peralta al llegar a las Chivas

Oribe Peralta al llegar a las Chivas

Si ha sido decepcionante el arranque del Cepillo Peralta en las Chivas del Guadalajara, bastante peor ha sido el desempeño del subsecretario del mismo apellido en sus primeros tres meses como segundo de a bordo en Gobernación. En efecto, el abogado Ricardo Peralta no lleva ni tres meses de haber sido nombrado en ese cargo y ¡qué metidas de pata ha tenido! ¿Va solo?, ¿lo consecuenta doña Olga?, ¿lo utilizan de “prueba” para saber qué se tolera y qué no?

Empezando con su apoyo al desaseo y cochinero legal realizado en Baja California para aumentar el periodo de gobierno de Jaime Bonilla. Y ahora con su “brillante” idea de reunirse con grupos delictivos en Michoacán y apoyarles con la primera piedra de un parque agroindustrial.

¿Un subsecretario que ignora a los poderes locales?

Los gobernadores de Tamaulipas, Guerrero y Michoacán no tardaron en advertir de los acercamientos con ciertos grupos criminales que ni siquiera han depuesto las armas. Tal vez, si se quiere que una estrategia funcione en contra de los delincuentes o grupos criminales, sería bueno que el gobierno federal trabajara en conjunto de los gobiernos locales y no se los “salte” solo por no ser de su mismo partido. Error de Peralta haber ido a La Huacana en Michoacán y no haberse coordinado con el gobierno estatal. Si él considera que no se tiene que estigmatizar a las personas o a las regiones, bien haría no hacerlo tampoco con los gobernadores.

 

Las anomalías que el SAT le detectó

Antes de que fuese subsecretario, Ricardo Peralta fue el titular de la Administración General de Aduanas (no olvidemos que por las aduanas pasan más de 915 mil millones de dólares en mercancías al año). Margarita Ríos-Farjat, titular del SAT, y su equipo detectaron anomalías, mismas que se señalaron en un oficio interno (100-2019-11, 4 de marzo de 2019).

Algunos de los errores detectados:

√ Cuentas de Twitter y Facebook falsas. Con implicaciones gravísimas en control de pagos.

√ Publicación de “boletines que hacen referencia a procedimientos y decisiones que la suscrita no ha aprobado ni firmado, y sin embargo dice que se trata de procedimientos que serán incluidos en la próxima Resolución de Modificaciones a las Reglas Generales de Comercio Exterior Vigentes”.

√ 4 boletines informativos NO autorizados.

√ Las imágenes del Gobierno Federal, SCHP y del SAT no eran respetadas.

√ Estructura de comunicación alterna. La austeridad no le importó a Peralta.

√ Rumores de que la AGA sería un órgano desconcentrado, que solo abonan a la confusión institucional.

√ Ríos-Farjat le exhortó a hacer caso al SAT y a la SHCP.

√ La más grave: publicación de un micrositio de la AGA (6/02/2019) para un esquema de facilitación para la importación de hidrocarburos, el cual nunca estuvo aprobado. √ Lo peor, el comité de AGA embarró hasta el presidente y cuando el SAT consulta con presidencia, le informan que es mentira.

Aquí la larga pero necesaria cita:

“Me informa el comité que se pretendió justificar diciendo que habían sido instruidas por el Ejecutivo Federal, situación que además y en todo caso usted omitió informarme como correspondería. Al no contar con una instrucción por parte del Titular del Ejecutivo (el presidente Andrés Manuel López Obrador) que confirmara lo anterior, se consultó al respecto con el Consejero Jurídico del Ejecutivo Federal, quien aseguró que esa idea fue propuesta por usted, pero rechazada por el Presidente”.

Hasta la coronilla

¿Qué pensar del funcionario que pone al presidente de México como su escudo para expresar evidentes falsedades y justificar todas las “anomalías” comentadas antes? Simplemente, que debe tener hasta la coronilla —por decirlo educadamente— a Andrés Manuel López Obrador.

Hasta la coronilla o hasta el gorro, sí, porque a lo anterior se le debe agregar las reuniones que Peralta tuvo en los diferentes estados con grupos armados. Se ha demostrado que tener civiles armados es una muy mala idea en el número de muertes, violencia y pérdida del control por parte del Estado. Ante lo cual, ¿cómo es posible que el subsecretario Peralta se reuniese con estos grupos? Es socavar el Estado que representa y también saltarse las formas y razones, a la misma Guardia Nacional creada por Andrés Manuel.

El regaño

En la mañanera del jueves, Andrés Manuel “regañó” al subsecretario, diciendo que su proceder no era correcto. Peralta dijo que la reunión había sido con autodefensas o con grupos sociales de lucha, pero no con delincuentes. Sería bueno recordarle al subsecretario que esa función recae en la Secretaría de Seguridad, no en su subsecretaría. ¿O es que precisamente lo que busca es encabezar dicha dependencia? Alfonso Durazo, curtido en grillas desde los tiempos de Colosio, desde luego no se va a dejar. Supongo que ya ha detectado las “rarezas” de Peralta, que insisto, no es Oribe, el de las Chivas.

¿Y la respetada ministra?

Impresionante, por decir lo menos, que una de las ministras más aguerridas en la Suprema Corte de Justicia hoy se vea tan perdida, tan bucólica ante los temas que debería llevar en su área. El jueves corrió el rumor que estaría por presentar su renuncia si el Presidente despedía a Peralta. Por lo visto ella también está terca en formar parte de un dolor de cabeza del presidente que tanto vulnera la seguridad del país.

No son goles fallados...

Si los errores del protegido de la señora ministra secretaria se tradujeran solo en derrotas para las Chivas, sería terrible para los hinchas del equipo más popular de México —algo en sí mismo indeseable—, pero en este caso las fallas del subse Peralta son terribles autogoles en la portería que defiende el presidente López Obrador y que tiene un nombre: tal portería se llama México, nuestra nación que necesita y merece funcionarios mucho más serios.

No todo está perdido para Peralta y doña Olga. Pueden rectificar. Él todavía tiene tiempo —ya no mucho, Andrés Manuel empieza a perder la paciencia— para hacer correctamente su trabajo. La secretaria tendrá que entender que si su responsabilidad exige sacrificar a un amigo, deberá hacerlo aunque le duela. La prioridad es México, no los cuates. De Ricardo Peralta depende corregir el rumbo o visitar headhunters para que le consigan nuevo empleo. De él, y solo de él depende su futuro.