Cuando hay acceso a señal del satélite en lo apartado de la selva, leo la prensa extranjera para ver cuál es la tendencia, qué se redacta en sus páginas sobre la contienda electoral 2012 en México.  Anne-Marie O´Connor del Washington Post, se lleva el premio como promotora oficial de la guerra sucia desde allá contra el candidato más popular, AMLO.

No puedo dejar de notar, que es mínima la mención en el exterior, tanto de las protestas estudiantiles contra la antidemocrática manipulación de los medios y el sistema impuesto por la oligarquía, así como de las convocatorias a la (falta de) autoridad, que organiza con éxito el poeta activista Javier Sicilia.

Por lo general, la visión de los analistas extranjeros con mirada influenciada y puesta hacia nuestro “inhóspito territorio narco”, es coartada o velada por conveniencias de tipo transnacional, por lo que no se informa o no se da “importancia” a hechos que atenten contra esta hegemonía, obstruyendo lo patente:

El que para nuestro país son en extremo relevantes e históricas las marchas pacíficas de los jóvenes universitarios #yosoy132, que han imantado a los sindicatos de trabajadores independientes, a demás asociaciones civiles y ciudadanos unidos por el hartazgo socio político que ha imperado por décadas, siendo gota que derramó el vaso justo esa deliberada obstrucción de la verdad llevada a cabo por los medios, así como el  macabro clima de asesinatos y violencia en el que nos sumió la administración de Calderón.

México ya no aguanta más.  

“Bienvenidos, los estaba esperando: La Patria”, se leyó aquel día en una gran manta colocada en la explanada de la estela de luz, símbolo de la decadencia PRIANista. Se le atribuyó al movimiento que encabeza Sicilia que ahí los esperaba.  

La transformación nacional rumbo a establecer la paz y la dignidad en nuestro suelo, está dándose.  Se desmorona el régimen.

Pero que no se haga mucho eco ni se le de notoriedad, parece ser la consigna en la prensa de fuera.  Se continúa manejando la idea de que el PRI retornará.

Pero la realidad es otra. El cambio verdadero se gesta, es obvio que viene. Jóvenes, viejos y mayorías, víctimas del México dolido y afectado, lo reclaman. 

Se hará justicia.