Me refiero a la foto, en realidad no puedo creer que Enrique Garay se sacara la foto por propia mano, es mas, ni siquiera creo que sea “su amiguito” el de la  foto.  Esto fue una jugada del destino, muy mala por cierto.  Nadie absolutamente nadie, nunca en la vida sabremos la verdad, ni siquiera como muchos tuiteros propusieron, entrevistándolo López Doriga y diciéndole:  “Juay de pitin”.  

 

Ese Quique Garay sí que supo llamar nuestra atención bastante tiempo, el día de hoy les tengo una super noticia: ¡ENRIQUE GARAY YA NO ES TT, ¿Cómo es posible que las partes nobles de un fulano tan wannabe fuese trending topic durante casi 3 días? 

 

Analizando su caso puedo suponer que existen varias probabilidades acerca de lo sucedido la noche del pequeño accidente de Garay:

 

- Alguien tomo el celular de Garay lanzó el tuit, agarró el primer pene que se encontró en imágenes de pequeña resolución en internet y puso el texto “¿te la comes?”.

 

- Garay busca hacerse famoso, salir en algún programa y que lo sucedido sea digno de una historia en la Rosa de Guadalupe, una enseñanza reflexiva para prevenir que esto le pase a cualquiera.

 

- Próximamente veremos a Enrique Garay en algún comercial promocionando salchichas cocteleras, diciendo frases como: “Te la comes”.

 

- Quizás solo fue un mensaje de Enrique Garay hacia el mundo cibernético  y nos quiso dar  un consejo: “Las redes sociales no son para ligar”.

 

- Enrique Garay quería estar en boca de todos, para ganar rating en su programa, y que ya dejáramos de verlo como el ex de la Nacha Plus.

 

- Tal vez Enrique Garay como buen samaritano quiso alegrar a los tuiteros por varios días con su aparato reproductor masculino, así el nivel de las malas vibras tuiteras bajaría de manera sorprendente (awww cosita, digo... ternurita).

 

Equis, el asunto es que pobre Enrique Garay, él solo estaba tratando de tener una vida y resulto ser la “comidita”.  Imagino la regañiza que le han de ver puesto en TV azteca por el “problemita” en que se encuentra gracias a sus genitales.