¿Quién es Enrique Aquino (@Enrique_Aquino)? 

Es uno de los operadores de redes sociales más cercanos a Enrique Peña Nieto (EPN). Está encargado de la operación de redes del Instituto de Capacitación y Desarrollo Político del PRI. Su estilo es agresivo, provocador y ofensivo, por eso sorprende que ahora quiera hablar sobre violencia en su columna “AMLO y la violencia” publicada en OyeMéxico. 

De risa que Aquino hable de violencia

Es de risa loca que Aquino hable de violencia, cuando él fue uno de los personajes más violentos durante la campaña EPN, no había día que una crítica a su amado amo (EPN) le pusiera los pelos de punta y empezará a insultar, incluso llegó a amenazar a varios tuiteros, por eso sorprende que un señor tan violento hoy se envuelva en bandera blanca y hable de violencia. 

En febrero del presente año, Aquino se encargó de atacar a Josefina Vázquez Mota día y noche, cuando Vázquez Mota ya no representó un peligro para su amo, se encargó junto con sus bots a atacar a Andrés Manuel López Obrador y a medios de comunicación como la revista Proceso y a algunos reporteros como Álvaro Delgado, su forma de violencia: la guerra sucia. 

El Sr Aquino no tiene autoridad moral para hablar de violencia cuando él es un violento, además, con que autoridad habla de violencia cuando es miembro del partido político más violento que tiene este país y cuando su amo es otro violento. 

En su columna dice: “no hablaré sobre la violencia política que ha ejercido Felipe Calderón, ni de la violencia estructural; la cual sufre la mayoría de los mexicanos por la desigualdad social, tampoco de la violencia cotidiana”. 

Se le olvida al señor Aquino que es durante los gobiernos del PRI donde el país ha sufrido más violencia, quitando el sexenio del espurio Calderón. Acaso se le olvida que fue el PRI y Díaz Ordaz los que mataron miles de estudiantes en 1968 en la Plaza de las Tres Culturas, o se le olvida lo sucedido en 1971 donde un grupo paramilitar creado por el gobierno mató miles de estudiantes, desapareció y encarceló a otros miles. Acaso se le olvida que durante la década de los setenta, el PRI y el gobierno crearon la Brigada Blanca con el objetivo de asesinar o desaparecer a quienes estuvieran en contra del gobierno. Acaso ignora lo sucedido durante el gobierno del priista Carlos Salinas de Gortari, donde hubo más de 400 opositores asesinados o desaparecidos. Acaso no sabe de lo sucedido en Acteal y Aguas Blancas. 

Y como estos, muchos ejemplos más de cómo el PRI es un violento y un opresor. Y sin embargo, sabiendo todo esto, el Sr. Aquino que hoy habla de violencia cuando pertenece a un partido tan violento, que falta de congruencia y que falta de dignidad. 

No solo el PRI es famoso por la violencia física (asesinatos, desapariciones), sino también psicológica (amenazas) y lo que él llama violencia estructural. Sino lo sabe, yo le recuerdo que la violencia estructural que viven hoy millones de mexicanos es en gran parte culpa del PRI y de sus malas políticas socioeconómicas. Acaso desconoce que es por culpa del modelo neoliberal (traído por el PRI) la causa de la pobreza de la gente, de la falta de oportunidades. 

No solo trabaja para un partido político violento, sino trabaja para un político violento. Peña Nieto, fiel a las costumbres priistas, hace de la violencia parte de su política de estado, como olvidar lo sucedido en Atenco, como olvidar su discurso en la Universidad Iberoamericana donde afirmaba con cinismo que utilizaría la fuerza del estado para restablecer el orden. Como olvidar al profesor del Estado de México violado y humillado durante el gobierno de EPN, donde el profesor ha declarado que fue EPN quien lo mandó a encarcelar y violar por tener una preferencia sexual diferente a la del gobernador. Si todos estos actos para el Sr. Aquino no son violencia, pues no se que signifique violencia para él, si lo son, que poca dignidad trabajar para un violento y un asesino. 

También durante la campaña hubo muchos actos de violencia, generalmente todos provocados por el PRI y colaboradores cercanos a EPN. Por internet, el artífice, Enrique Aquino. Durante la campaña arrojó la piedra, como dice el dicho, y hoy esconde la mano y se envuelve en la bandera de la paz para hablar de violencia. 

¿Qué no sabe que insultar, amenazar o agredir son actos de violencia? 

¿Qué se le olvida que durante toda la campaña de su jefe EPN él fue un violento más que agredía a simpatizantes de otros partidos? 

Si se le olvida, que falta de memoria. 

Aquino por estas y más razones no tiene autoridad moral para hablar de violencia, además, los argumentos que utiliza para decir que Andrés Manuel López Obrador (AMLO) genera violencia simbólica a sus simpatizantes carecen de argumentos sólidos.  Dice: “los Pejistas se han vuelto personas programadas, sin alternativas”. Para empezar no creo que los simpatizantes de Obrador sean personas programadas, sin alternativas, basta con ver y hacer un análisis de la encuesta realizada por el diario Reforma donde mostraba una clara correlación entre el nivel educativo y la tendencia al voto. La encuesta revelaba que a mayor nivel educativo, el porcentaje de personas que iba a votar por AMLO era mayor, incluso mayor del 50%. En cambio, los simpatizantes de EPN eran los de menor nivel educativo.  Es bien conocido por todos, y la ciencia lo demuestra, que es más difícil engañar o manipular o programar a alguien que durante toda su vida ha leído, estudiado y se ha forjado un criterio propio. En cambio, una persona que no sabe leer ni escribir, una persona que su nivel educativo es similar al de un niño de primaria es más fácil de manipular. Entonces surge la duda, ¿No es más fácil que EPN programará a sus seguidores? La respuesta obvia y correcta es si. EPN junto con las televisoras a su favor, programaron a miles de millones de mexicanos que por falta de oportunidades no pudieron ir a la escuela y su nivel educativo es similar al de un niño de primaria, ambos muy fácil de manipular, el niño por falta de experiencia, el adulto por falta de educación. Durante la campaña los únicos “programados”, la televisión metió la idea a miles de mexicanos de que el mejor candidato era EPN, utilizando una estrategia similar a la que usan las compañías para meter sus productos milagros. 

Si Aquino fuera más crítico, no solo renunciaría a un partido violento como es el PRI, su columna de hoy, debería titularse Peña Nieto y la violencia, y explicar como EPN y el PRI también son violentos simbólicos al programar a sus simpatizantes. Basta con escuchar algunas declaraciones de los simpatizantes de Peña Nieto para darse cuenta ellos eran los manipulados y “programados”. Basta con preguntarle a los votantes de EPN las razones de su voto, para darse cuenta de que es el PRI quien manipula a la gente y lucra con su pobreza e ignorancia. 

Así como Aquino concluye con una propuesta a lo que llama “pejistas”, yo le propongo, sea más autocrítico, congruente y tenga un poquito más de dignidad. 

La última y nos vamos: La cita con la desgracia 

Si se consuma la imposición de Peña Nieto el 6 de Septiembre, México tiene una cita con la desgracia. Muchos opositores de AMLO fieles a su fanatismo celebran la cita con la desgracia, bajo el concepto de “ya se jodieron al peje”, sin embargo, fieles a su ceguera, olvidan que la desgracia es la llegada a la presidencia de un ignorante como Peña Nieto. La desgracia no es exclusiva de AMLO y sus seguidores, es de todos los mexicanos, que van a tener que soportar durante 6 años a Peña Nieto. ¿Qué no nos espera con el nuevo PRI y el gobierno de Peña Nieto? http://www.sdpnoticias.com/columnas/2012/08/14/el-prinosaurio-reloaded 

@Octavio_Mancini