La crisis de salud provocada por la expansión de la pandemia de Covid-19, ha ocasionado una depresión económica severa en México y en la mayoría de los países del orbe; esto por el cierre de diversas actividades económicas, así como por las medidas de confinamiento y aislamiento social que se tomaron para detener los contagios. 

Sí las vacunas para inmunizar a la gente de contagios de Coronavirus funcionan, llevaría a una fase de desconfinamiento de la población y la reactivación de la economía, pero esto último no podría llevarse a cabo sin una estrategia de recuperación, como la que se hizo después de la segunda guerra mundial conocido como Plan Marshall.

La expansión de la epidemia provocada por el virus de SARS-Cov-2 en el mundo ha hecho que las personas pierdan sus fuentes de ingreso de forma permanente y entren en espirales de pobreza debido al impago de deudas, gastos catastróficos o problemas de salud.

Según estimaciones del Banco Mundial la cantidad de nuevos pobres en el mundo surgidos como consecuencia de la pandemia de Coronavirus en 2020 aumentará entre 119 millones y 124 millones y es por ello que surge la necesidad de una estrategia económica a nivel planetario para revertir esta tendencia, adaptando los principios del Plan Marshall a la nueva realidad.

Hay que recordar que el Plan Marshall fue un programa impulsado por Estados Unidos tras la Segunda Guerra Mundial para ayudar a los países europeos a recuperarse de la destrucción provocada por el conflicto. Este proyecto fue presentado en 1947 por el secretario de Estado George Marshall, y, aunque su nombre oficial era "European Recovery Plan" (Plan Europeo de Recuperación), pronto se lo conoció como Plan Marshall.

Con este plan, Estados Unidos ofreció asistencia técnica y administrativa a los países europeos, así como 13 mil millones de dólares para reactivar sus economías. En un inicio, esta ayuda consistió en el envío de alimentos, combustible y maquinaria, y más tarde en inversiones en industria y préstamos a bajo interés. Los dos países que más asignaciones recibieron fueron el Reino Unido y Francia. Italia y Alemania también recibieron importantes ayudas, a pesar de que habían sido enemigos de la nación de las barras y las estrellas durante la guerra.

El programa de ayuda estadounidense fue un éxito y los países europeos reactivaron su economía, se crearon empleos y la demanda aumentó, mientras que la economía norteamericana crecía erigiéndose como la primera potencia del mundo.

La crisis económica provocada por la pandemia de Covid-19 ha hecho que la mayoría de los países hayan hecho sacrificios fiscales para tratar de reactivar sus economías

En Estados Unidos los apoyos económicos para mitigar los efectos nocivos al empleo por la pandemia han sido los más importantes en su historia y en la del mundo. El año pasado el gobierno de Donald Trump inyectó a la económica 3 billones de dólares, incluyendo, entre otros conceptos: 250 mil millones para efectuar pagos con cheques directos de 1,200 dólares a ciudadanos con un ingreso menor a 75 mil dólares al año, añadiendo 500 por cada menor de 17 años; 350 mil millones a préstamos para pequeñas empresas; 250 mil millones para ampliar los beneficios por seguro de desempleo; 150 mil millones para apoyar a las autoridades locales y estatales; 130 mil millones para reforzar el sistema sanitario; 500 mil millones para empresas de sectores estratégicos como aerolíneas o el sector turístico. En un segundo paquete, se asignaron 484 mil millones de dólares más para préstamos a pequeñas empresas, agricultores y fondos de hospitales.

Todo este sacrificio fiscal del gobierno estadounidense de poco ha servido ya que las medidas de confinamiento y de cierre de actividades económicas se tienen que seguir tomando debido que la pandemia no se ha controlado y ha provocado miles de muertos y hospitales hasta el tope de personas contagiadas de Covid-19.

El presidente electo Joe Biden informó hace unos días que dará a conocer una propuesta de paquete de estímulo de 1.9 billones de dólares, diseñada para reactivar la economía de Estados Unidos y acelerar la respuesta del país a la pandemia de coronavirus.

El paquete del mandatario electo apunta a poner recursos para administrar más rápido la vacuna contra el coronavirus y afianzar la recuperación económica; para esto se tiene contemplado 415 mil millones de dólares para reforzar la respuesta al virus y desplegar las vacunas, alrededor de 1 billón de dólares en ayuda directa a los hogares y unos 440 mil millones de dólares para pequeñas empresas y comunidades muy afectadas por la pandemia.

El 23 de abril de 2020, los dirigentes de la Unión Europea (UE) se propusieron crear un fondo de recuperación de los países miembros destinado a mitigar los efectos de la crisis, provocados por la pandemia. El paquete de medidas de recuperación global de la UE asciende a 2.3643 billones de euros.

Otros países como Japón entre otros han inyectado a sus economías grandes cantidades de recursos fiscales, pero estos no han dado los resultados esperados ya que la pandemia de Coronavirus no se ha frenado en gran parte del mundo.

El presidente de México Andrés López Obrador, informó el pasado mes de abril del año los detalles de la conversación que sostuvo con el CEO del fondo BlackRock, Larry Fink, y dijo, que le había planteado tres acciones para enfrentar la pandemia del Covid-19 y la crisis económica que se prevé, entre ellas, una “especie de Plan Marshall” para los países en pobres.

“Lo tercero que le planteé es que se requiere un plan de apoyo a los países en vías de desarrollo, para las economías emergentes y sobre todo para los países pobres, se requiere una especie de Plan Marshall, se lo planteé.

Y no veo nada, no escucho al Fondo Monetario Internacional, no escucho al Banco Mundial, a lo mejor yo como estoy ahora muy atareado más de lo normal no estoy viendo noticias, pero no hay ningún pronunciamiento de ayuda, de apoyo, no con créditos leoninos, sino cooperación para el desarrollo Entonces, hablamos de esto. Afortunadamente, nosotros tenemos nuestras reservas. Por eso, vuelvo a decir, una recomendación muy respetuosa al Banco de México... que no se vaya a caer en la tentación de empezar a soltar dinero de las reservas".

Hay que recordar que México es uno de los países que menos ha inyectado recursos fiscales extraordinarios a su economía en está crisis sanitaria; pero por otro lado es también una de las naciones que se ha endeudado menos en lo que va de la pandemia y hay signos de recuperación a pesar de no sacrificar recursos.

En mi opinión hay que buscar primero detener el avance de la pandemia provocada por virus de SARS-Cov-2 en todo el mundo y para esto se necesita que las potencias ayuden a las naciones más pobres con vacunas y después sentarse hacer un plan para reactivar la economía global y la estrategia debe comprender a todas las regiones del planeta, por que sino se corre el riesgo de que aumente más la pobreza, que se contraiga la demanda, aumente la violencia y el caos, cosa que afectara a la mayoría de la población mundial.

El plan para reactivar la economía mundial que necesariamente se tendrá que hacer debe de adaptarse a una nueva normalidad y a las recientes relaciones laborales que se están dando debido a la crisis sanitaria.

El Plan que se elabore para la reactivación económica debe de incluir quitas y baja de intereses en la deuda de las naciones, esto con el fin de sanar las finanzas publicas y poder invertir en proyectos productivos una vez que se frene la pandemia de Covid-19.

Aeroméxico aplicara medidas pedidas por el Gobierno estadounidense

La línea aérea del caballero águila, informó que a partir del día 26 de enero se requerirá a todos los pasajeros de dos años de edad en adelante, que deseen viajar hacia los Estados Unidos, presentar una prueba de Covid-19 con resultado negativo bajo las siguientes consideraciones:

Pruebas aceptadas: Reacción en cadena de la polimerasa (PCR) o Prueba de antígenos expedida por un laboratorio.

Fecha de realización de la prueba: Máximo 3 días antes del inicio del viaje (con o sin escalas).

Adicionalmente, el gobierno de los Estado Unidos solicitará que los pasajeros completen un formulario para confirmar la validez de la prueba entregada.

Aeroméxico implemento para sus clientes una política de flexibilidad para aquellos pasajeros que, por este nuevo requisito, necesiten cambiar su vuelo.

La aerolínea dirigida por Andrés Conesa Labastida y su principal socio comercial, Delta Air Lines, trabajan en coordinación con las autoridades de México y Estados Unidos para implementar los nuevos requisitos. Además de que se seguirá aplicando en todos sus vuelos, los más altos estándares de la industria a través de su Sistema de Gestión de Salud e Higiene.