Un motor que se ahoga y repentinamente para, situación que checa a la perfección con la falta de combustible , por otra parte 286 litros de turbosina derramados de un motor roto habrían tenido que ocasionar un incendio de mucho mayor envergadura al que se muestra en las imágenes.

Por otro lado, un acuator hidráulico que eventualmente de desvía, a grado tal que 11 días antes del percance se ordene su cambio sin que ello sea obedecido, resulta digno de analizarse.

Una de las causas que afectan las válvulas de los acuatores, estriba, precisamente, en la falla de combustión de los motores, que suele darse por falta de combustible, o bien por falta de oxigenación tal y como habría constado en diversas observaciones que ocasionaron la limpieza de espreas del helicóptero de modelo “Augusta” en varias ocasiones durante el transcurso del 2018.

Lejos de lo que habría apuntado previamente, en un cuerpo carbonizado sí pueden detectarse restos de ingesta de alcohol, o estupefacientes, y también, el momento del deceso con márgenes de error de hasta media hora aproximadamente, por lo consiguiente, resulta digno de llamar la atención que se haya establecido que no pueda esclarecerse la hora del percance.

Si algún alma pérfida llega a sugerir, que el marcador en la tableta de controles marcaba 286 litros de turbosina sin que estos existiesen en la realidad, alterando subrepticiamente la aguja del marcador, no habría que hacerle ningún caso pues se trataría de eso, precisamente, de un alma pérfida, aun cuando claro, ... no estaría de más indagar; tres vuelos llevados a cabo en las dos jornadas previas del trágico suceso del “Cerro del Chacuaco” en Coronango, podrían muy bien explicar la disminución del combustible, sólo que el informante de aeronáutica civil señala la cantidad señala la cifra de 286 litros de turbosina sin que medie merma alguna.

De no darse tan espantoso extremo, la negligencia en el cambio del acuator observado en la respectiva bitácora, daría pie a responsabilidades por negligencia , cuya imputación dado el caso habría que desentrañar entre el personal de la empresa encargada de prestar el servicio: "Servicios Aeronáuticos del Altiplano" S.A. de C.V., o los de la empresa encargada del mantenimiento del aparato "Rotor Fleying Services" S.A. de R. L.