Un equipo de investigación del Ejército de los Estados Unidos ha desarrollado una granada de 40 milímetro, la cual integra en su interior una red diseñada especialmente para capturar y derribar drones enemigos.

Los documentos de la patente sugieren que a medida que la granada se acerca a su objetivo, una señal activa un motor que impulsa un mecanismo de bola, el cual a su vez libera los pesos de la red a través de un sistema de resortes de expulsión.

Este tipo de dispositivos son más prácticos y relativamente más económicos, comparados con otras armas convencionales de superficie a aire, como los misiles lanzados desde el hombro diseñadas para atacar aeronaves piloteadas.

La necesidad de sistemas que contrarresten la presencia de drones se ha hecho más evidente durante el último año, donde estas naves no tripuladas han causado diversos accidentes, principalmente atrasando vuelos en aeropuertos de diferentes partes del mundo.

En diciembre del año pasado, una serie de drones no autorizados causaron largos retrasos durante tres días en el Aeropuerto Gatwick de Londres, el segundo aeropuerto más grande del Reino Unido.

Con información de Tech Link Center.