Anoche soñé que alguien (a quien no conozco) me tomaba en sus brazos y me pedía matrimonio. Nunca me he casado en realidad, mi rebeldía me llevó a vivir siempre en unión libre. No había pensado lo que significaba el matrimonio, hasta anoche.

Cada vez son menos los matrimonios. Desde mi perspectiva ahora, después de vivir en unión libre, veo las implicaciones que tiene. Para empezar, el compromiso, el saber que una persona realmente tiene toda la intención de "toda la vida".

Lo que es bien cierto es que estamos en una época en que las parejas que se mantienen unidas con respeto, amor y tolerancia, son pocas. Esto genera que hoy en día, las relaciones estén teniendo una transformación abrumadora.

Estamos en la era de la familia parche, ésta se conforma por hijos de ella, hijos de él y tal vez hijos de ambos, en otras ocasiones estas familias cuentan con la presencia de un padre o una madre, los hijos desde pequeños tienen que ver a sus padres no solo como esos ídolos perfectos que antaño se acostumbraba, ahora ven a sus madres como mujeres que necesitan una pareja y a sus padres como aquel que algún día tendrá novia y está bien.

Evidentemente la comunicación es distinta, la atención a los hijos es menor, pues ahora no está dirigida a los hijos, sino que se fragmenta entre varios aspectos, los hijos, la pareja, y la familia.

No me quiero meter esta vez en las consecuencias sociales futuras, podemos intuirlas como tal.

Lo que me pregunto yo es: ¿Dónde quedó el amor? Muchos me dirán que buscan a su pareja; lo que es bien cierto es que las redes sociales, crean la imagen de poder encontrar la pareja perfecta fácilmente, recuerdo en mis inicios por internet haber visto muchos de mis amigos encontrar novia y rápidamente terminar las relaciones e iniciar otra con la misma facilidad.

Cuando me separé hace un año y medio, pensé que sería difícil encontrar pareja. Pero al ver a mis compañeros de primaria o contemporáneos míos, muy pocos mantenían una relación de pareja estable, la mayoría estaban separados o sin casarse. Evidentemente esto abría una puerta para mí para "conseguir pareja" pero no es tan sencillo, pues ahora los hombres de treinta, se encuentran igual que hace 15 años, "buscando novia".

Yo creo que es muy complejo vivir en pareja, sin embargo también pienso que a la famosa "Generación X" algo nos pasó, algo salió mal o tal vez bien, pero estamos en crisis de pareja y eso repercute en una enormemente en la familia. Y Bueno esperemos ver las implicaciones que tendrá esto en los hijos.

Al despertarme de mi sueño, me di cuenta que como todos, deseamos llegar a casa y darle un beso al hombre o mujer que amamos, pero también pienso que trabajar y salir adelante como madre soltera es importante.

Ayer fuimos mi hija y yo al cine, solas; tal vez por primera vez desde que me separé, disfruté a mi hija y ella a su madre, pero siempre es lindo ese rol de familia clásica que ahora se ha transformado, porque es seguro que mi hija jamás ira al cine con sus dos padres. Así como muchas mujeres y hombres que vi sentados a mi lado con sus hijos sin su pareja. Es triste, pero así es. Tenemos que aprender a vivir en pareja y sin ella. Los que aún viven unidos tienen que aprender a cuidarse, a compartir juntos, con respeto y con cariño. Realmente es un lujo para un niño salir con ambos padres. Pero dudo que sea bueno hacerlos vivir en un ambiente hostil, así que la sociedad tendrá que adaptarse y esperemos las consecuencias que veremos en los niños los que hemos decidido estar separados de los padres o madres de nuestros hijos.