Mamá Mery, mi tía abuela, una mujer fuerte y valerosa. Cuando estaba por cumplir yo 18 años, ella ya tenía como 80. Aun así recuerdo cómo emocionada me mostraba las fotos de ella y mi tío en la valiente expropiación petrolera. Sí, mi familia paterna es de "petroleros", como diría mi abuela. Mi abuelo murió en "Refinería" (como le dicen todavía, aunque ya no refinan nada), en Azcapotzalco. Mi abuela me contaba cómo mi abuelo cerró unas válvulas de seguridad porque el encargado se había agarrado tremenda guarapeta. Cuando mi abuelo se dio cuenta, alcanzó a cerrar casi todas las válvulas, explotando solamente un fragmento de la instalación, en la que él estaba. Me contaba también de cómo mi abuelo se sentó a esperar a los paramédicos con quemaduras en todo el cuerpo; una tía mía hasta la fecha nos cuenta sus últimos días en el hospital a todo detalle, mi papá tenía 9 años apenas. No me pregunten por qué o cómo, es la parte de la historia que me sé. Hace algunos años mi hermanamecomentó que en marzo realizan en esta planta una ceremonia por todos los caídos en las instalaciones de esta refinería que ya no refina.
Como verán, desde niña conocí esto del petróleo, pero no le di demasiada importancia, pues esa herencia ya no me correspondía. Sin embargo, sí conozco los terribles daños que un solo barril de petróleo le puede hacer a la ecología en un ecosistema marino. Es sencillo: MUERTE; mueren las especies marítimas, con ellas también las aves, pero eso no es todo, las corrientes marítimas arrastran la mancha negra. Como saben todos ustedes, el agua y el aceite no se mezclan, en este momento puede haber gotas de petróleo en Alaska y, puedo enumerar más consecuencias; todas son terribles.
Lo que estamos viviendo por un error americano, no nos han permitido dimensionar la realidad de ésta pérdida. Yo misma he evadido esta tragedia, no por no sentir el dolor de este daño al hermoso planeta, sino tal vez para no querer enfrentar esto porque me conozco.
Es sencillo, cada segundo que pasa es terrible para la ecología, miles de barriles de petróleo están siendo derramados al día. Y todo para que el hombre en su absurda vanidad pueda satisfacer las necesidades creadas para mantener a los grandes empresarios, en una búsqueda de tener poder, dinero y "amor".
Se sigue explotando del subsuelo este material. Por fortuna, hoy existen medios para obtener la energía del sol, por desgracia no son "negocio" porque generan una autosuficiencia energética, y bueno, la energía y las comunicaciones son de los negocios más redituables hoy en día en el mundo. Luego entonces, en lo que escribo y ustedes leen, millones de especies completas de un delicado y hermoso ecosistema están muriendo. ¿Qué podemos hacer? Tal vez mucho, tal vez nada. Solo puedo esperar que algún genio logre hacer algo para poder apartar el petróleo derramado del agua y filtrarla... pero no lo sé.
Cuando estudiaba el CCH estando en el programa de jóvenes a la investigación, yo hablaba de que debemos respetar y cuidar a la naturaleza que tanto amo. Pero un compañero me dijo algo: "Imagínate que estás en la naturaleza. ¿Qué haces?". Pues, nada estoy parada. "¡Exacto! Y estás alterando el ecosistema con tus pies. ¿Las carreteras? Rompen por completo el ecosistema".
Lo grave de contaminar, no solo es el daño que se genera, sino que escasean los alimentos para una población mundial en crecimiento, más problemas sociales, más escasez, más... más... más...
Por eso no quería hablar de éste tema. 1) Podemos hacer lo mejor para evitar productos derivados del petróleo, pero no podemos dejar de ir al baño por lo menos tres veces al día. 2) Podemos dejar de tirar basura en la calle, pero seguiremos usando papel de baño, papeles para escribir, luz para ver, en fin. El hecho es que dañamos a la ecología porque somos muchos. Lo mejor que podemos hacer es hacer lo mejor. Es decir (repito lo que siempre digo como las tablas de multiplicar): Si nos respetamos, respetaremos nuestro entorno, esto no garantiza dejar de dañar, pero si genera menores daños que si se suman en millones de habitantes se ve una disminución de las consecuencias ecológicas. Si cuidamos nuestro entorno siendo respetuosos con la madre naturaleza, ella nos va a regalar sus bellezas.
Lo que pasa en el Golfo de México es como ver a una madre desangrarse, me duele demasiado, por eso lo evado. Suplico que esto pare, que las personas americanas si no pueden, llamen a los petroleros mexicanos, ellos sí "se la rifan" y son tan fregones que con un popote y unas ligas solucionan cualquier problema (bueno, algunas cositas más y casi todos los problemas). No por nada cuando la expropiación petrolera, los ahora llamados "indios mexicanos" en Arizona, lograron lo que las compañías inglesas no creían posible: tomar el control de las instalaciones. Se la "rifaron" plenamente. ¿Ve señor Calderón por qué no debe vender PEMEX? Sé que lo han hecho desde Salinas, a cachitos, dándoles entrada a estos "gringos" que pese a "ser los mejores" no pueden con un problema que en verdad nos va a afectar a todos.