5 de mayo de 2024 | 05:17 p.m.

Una propuesta para terminar definitivamente con el problema palestino-árabe-israelí

En opinión de Alberto Halabe, la solución consiste en tener un territorio donde puedan convivir todos aquellos palestinos, árabes e israelíes que lo deseen, sin restricciones, en una “zona libre”, donde predomine la armonía
Compartir en

“No hay mal que dure 100 años…”

Conocimiento profético universal

Aunque parecen interminables los conflictos entre árabes e israelíes, y entre palestinos y árabes e israelíes, incluyendo bélicos y de atentados provocados y/o terroristas, sí existe una solución a toda ésta problemática humana y humanista que inició hace 75 años.

La solución consiste en tener un territorio donde puedan convivir todos aquellos palestinos, árabes e israelíes que lo deseen, sin restricciones, en una “zona libre”, donde predomine la armonía, la paz social, las relaciones humanas, pero sobre todo, las transacciones económicas y de negociación entre ellos, las cuales siempre fueron ancestralmente muy fructíferas, hasta que iniciaron las famosas intifadas en los 80′s; un territorio similar al de Suiza de la Segunda Guerra Mundial.

Y el mejor lugar para establecer un estado neutral para judíos, árabes, y palestinos, sería la misma Península del Sinaí, un territorio que perteneció a Israel durante 15 años, de 1967 a 1982, años en los que lo adaptaron urbanamente como si hubiera sido formalmente parte de Israel, y posteriormente, volvió a ser parte de Egipto, como lo fue desde finales de la Primera Guerra Mundial con la campaña del Sinaí, y consolidándose como nacional egipcio de 1956 a 1967 con la expropiación del canal de Suez adyacente por el presidente Nasser, y hasta la fecha después de 1982.

Por eso esa región, que podría seguirse llamando Península del Sinaí, sería el país ideal donde pudieran convivir todos los palestinos, árabes e israelíes que así lo decidieran, no sería gobernado ni por Israel ni por Egipto, sería como un principado independiente estilo Mónaco, y no se permitiría el intervencionismo extranjero de ningún tipo ni índole, serían independientes y autónomos.

Además, históricamente, la Península del Sinaí siempre ha tenido mucha relevancia, en tiempos bíblicos fue parte del imperio egipcio, también ahí habitó el imperio fenicio, del qué hay teorías sobre su descendencia palestina, y ahí el pueblo judío recibió las leyes, en el Monte Sinaí, incluyendo los 10 mandamientos, que hasta la actualidad rigen a toda la humanidad.

Y sí, la presente propuesta por ahora tiene calidad de sueño o ideal, pero con voluntad humana, política, y social, podría convertirse, en poco tiempo, en una ideología, y en una realidad.

Twitter: @cancercuretop2