A lo largo y ancho de todo el país, Claudia Sheinbaum tiene un ejército o, mejor dicho, una estructura que —con organización y planeación— está haciendo un trabajo de primera. Se nota en cada acto público o asamblea informativa en la que se presenta la candidata de Morena. En todas ellas, por cierto, las multitudes han dejado sentir su poder, de tal manera que todos los espacios lucen abarrotados. Eso, por tanto, es un punto a favor de la causa lopezobradorista que, además de mostrar fuerza, muestra la unidad que reina en el seno morenista.

En Jalisco, por ejemplo, el trabajo territorial que han llevado a cabo los coordinadores ha jugado un papel preponderante en la segunda visita de Claudia Sheinbaum a la entidad federativa donde, por cierto, Morena tiene grandes posibilidades de ganar con Delgadillo, candidata a la gubernatura. El punto es que, con una planeación muy detallada, se ha dinamizado cada una de las actividades, especialmente el activismo. Es simple: la coordinación de Mery Pozos, en términos políticos, ha sido una palanca de impulso, pero también un vínculo para muchos sectores de la ciudadanía. Como sabemos, la tarea de Mery, además de guiar a las estructuras, implica mucha responsabilidad, sobre todo de organización de toda la logística.

O sea que, en medio de este proceso electoral en Jalisco, Mery Pozos, tras bambalinas, se ha convertido en el instrumento operativo territorial, tanto de promoción y activismo, como en el liderazgo. Eso, desde luego, se notó en los recorridos que realizó Claudia por varios puntos estratégicos. El éxito de todo ello, queda claro, es mérito de Pozos, que hizo posible un marco perfecto para que Sheinbaum fuese cobijada con esa efervescencia de la población civil. Se nota que, además de ello, las decisiones que se han tomado han generado un impacto positivo. Recordemos que, a la par de sus funciones, Mery es candidata a diputada federal por el distrito 11, eso sí, con inmensas posibilidades de llegar a San Lázaro para profundizar las políticas públicas de la 4T.

Hay, en todo caso, muchos componentes que se han conjugado a la par del buen trabajo de los aspirantes. En Jalisco, en su gran mayoría, son perfiles de mucha capacidad y liderazgo político. En el caso de Claudia Delgadillo, sus posibilidades de ganar la carrera por la gubernatura son muy grandes. A pesar de que hay una guerra de encuestas, las metodologías de mayor confianza confirman que sigue en la delantera, simplemente como la mejor alternativa para la población civil. En efecto, la evaluación que publicó ayer MetricxMx —para SDP Noticias— muestra que hay un margen todavía muy importante del primer lugar que conserva Delgadillo. El propio sondeo, de hecho, ratifica el trecho que separa una fuerza de la otra. Morena, por ejemplo, tiene el 39% de la intención del voto, seguido de Movimiento Ciudadano, con el 30%.

Es una estimación muy favorable que, como dijimos, augura la alternancia en el estado de Jalisco. Eso habla de que hay, además de motivación, un armado o estructura que ha sabido aprovechar cada área de oportunidad. Mery Pozos, con una doble tarea, le ha coordinado las tareas a Claudia Sheinbaum de manera exitosa. Y no solamente es la promoción de la imagen para continuar afianzando a la candidata de la coalición “Sigamos Haciendo Historia”, sino el trabajo a ras de tierra que, desde cualquier perspectiva, ha sido muy eficaz.

Por eso ha aumentado la intención del voto a favor de Morena. La sociedad —en todos los sectores— está respondiendo a la propuesta y, con ello, cada vez se nutre la manifestación de apoyo a la 4T.

Por esa sencilla razón, hay muchos elementos que apuntan a la victoria contundente en Jalisco. En pocas palabras, la jornada del próximo dos de julio, con esa lógica, terminará con el éxito imponente de Claudia Sheinbaum. Con esa misma capacidad que han mostrado todos los candidatos, Claudia Delgadillo, con datos sólidos en las encuestas, se perfila a ganar la gubernatura. A su vez, el lopezobradorismo ha encontrado condiciones para llevarse la fórmula del Senado y, con ese efecto, el mayor número de posiciones legislativas para San Lázaro. Entre ellas, por supuesto, el triunfo inminente de Mery Pozos en el distrito federal 11. El manejo, planeación y coordinación de actividades de Sheinbaum en aquellas tierras, en particular de Mery, nos da una idea clara de la capacidad política que hay —en su gran mayoría— de quienes aspiran a cargos públicos.

A propósito, una de las grandes ventajas que ha tenido Claudia Sheinbaum ha sido el círculo de colaboradores que armó en vísperas del arranque. Se nota la gran diferencia de estructuras, sobre todo en capacidad y experiencia. Esto, por supuesto, está dejando buenos dividendos a la coalición que constituyen Morena, PT y PVEM. Podemos decir, con datos precisos, que el lopezobradorismo conquistará las 32 entidades federativas que están en juego. De manera paralela, ganará ocho o hasta nueve gubernaturas y, con esa inercia favorable, obtendrá mayoría en ambas cámaras legislativas. Hay casos, de hecho, donde Morena luce imponente en las encuestas de opinión. Uno de ellos, queda claro, es el estado de Jalisco, tan es así que, en plena visita de Sheinbaum, la efervescencia social se sintió con una multitud que abarrotó cada acto público que encabezó la próxima presidenta constitucional de México.