“¡Ave César!, los que vamos a morir te saludamos”.

FRASE DEL LATÍN

“No somos más que un gran campamento de negociantes frívolos e irresponsables ocupados sólo por el presente”.

MARÍA DUEÑAS

“El gobierno no es una razón, tampoco es elocuencia, es fuerza. Opera como el fuego; es un sirviente peligroso y un amo temible; en ningún momento se debe permitir que manos irresponsables lo controlen”.

GEORGE WASHINGTON

El legado obradorista

¿Qué recordaremos de este sexenio? Supongo, entre otras cosas, la eterna campaña.

¿Cuándo empezó la vorágine de anuncios sin fin que nos ahoga? Formalmente inició en el 2006; la primera etapa terminó con las elecciones del 2018. Luego, a partir del 2018 al 2021, se desenvolvió rumbo a las elecciones intermedias. Le siguió aquello de la consulta popular en contra de los presidentes y de ahí saltó a la revocación de mandato este año, y más tarde a las elecciones de seis estados de la República. Ahora estamos en la última etapa —esperemos— de aquí al 2024. Claro, en este último tramo habrá “una parada” en el 2023 por aquello de las elecciones que se llevarán a cabo en Coahuila y en el Estado de México.

El asunto es que los jugadores de Morena del 24 ya desde ahora iniciaron sus campañas a la presidencia de la República. Sí, el proselitismo eterno iniciado por Andrés Manuel, continuado por él, orquestado por él y ahora con corcholatas. Queda claro: si tuviésemos que definirlo en tres palabras, el lopezobradorismo es una eterna campaña.

Andan desatados

A los morenistas ni la ley los frena. Su propaganda nos inunda en redes, en conciertos, en WhatsApp; entre ellos mismos se promueven y se descalifican. El signo de la casa es violar la norma, aunque lo nieguen.

Veamos tan solo esta semana: Marcelo Ebrard, Adán Augusto López y Claudia Sheinbaum (por orden alfabético) se adentraron como nunca en las redes sociales. El canciller se sacó de la manga una organización de nombre ‘Avanzada Nacional’, además de dar su “what´s up” para que la ciudadanía se pueda comunicar con él. A través de su “avanzada” se difundirán sus actividades, incluyendo aquello de ‘mi carnal Marcelo’… Sin comentarios.

Como respuesta o siguiendo su ejemplo, López Hernández lanzó la página “Yo voy con Adán” en Twitter y Facebook, además de también dar a conocer su número telefónico personal. O sea, aprovechó para darle un rozón a Ebrard, diciendo que él sí contesta y no como el canciller que solo los deja en visto…

Además, Adán y otros morenistas hicieron gala de que el puesto de secretario de Gobernación poco importa cuando se trata de poner orden en los asuntos de Morena. Citó a diversos morenistas en sus oficinas en horas de trabajo para definir al candidato/a para los comicios del Estado de México del próximo año. Han hecho de la política y la responsabilidad de gobernar un triste circo.

Pero si de redes sociales se trata, la primera corcholata de Palacio, Claudia Sheinbaum, utilizó las mismas para hacer un live. Como queriendo -no queriendo-, mostró al público parte del departamento donde habita. También tocó la guitarra y avisó que la Maldita Vecindad estará en el Zócalo capitalino este 16 de julio y los Ángeles Azules el 31 de diciembre. Toda una promotora de OCESA, es decir, de conciertos masivos en pleno Covid. Y con cargo al erario, pero “gratuitos” para quien asista a los mismos…

Negó violar la ley cuando el senador Ricardo Monreal (también morenista, aunque se les tiende a olvidar) señaló que el “club de los elegidos” deben tener cuidado de no violar las normas, pues resultan contraproducentes los actos anticipados de campaña. En fin, ya sabemos aquello de “a mí no me vengan con eso de que la ley es la ley”.

Una cancha dispareja

Lo que me lleva a mencionar que en la carrera hay dados cargados. Es un ‘secreto a voces’: conversaciones internas que se dan a conocer; encuestas cerradas y amañadas; el mismo Ebrard dejándolo entrever al solicitar ‘piso parejo’…

Por supuesto, eso a los cuatroteístas no les molesta cuando se trata de que los demás posibles candidatos de la oposición no tengan la exposición de la que gozan los morenistas. No suficiente con que entre ‘los oficialistas’ hay cancha dispareja, el partido en el poder pone en mayor desventaja a la oposición.

A esto hay que adicionar ahora el que, con un cinismo absoluto, Morena anunció que presentará una iniciativa para prohibir que el PRI use los colores de la bandera nacional. ¿Será que se los quiere apropiar?

El asunto es que la iniciativa no estaría mal siempre y cuando le anteceda que la 4T deje de violar la Constitución usando los colores y logo de Regeneración Nacional en todos sus programas, actividades y anuncios de gobierno.

Otra cosa. ‘Las corcholatas’ no se han dado cuenta que, de pronto, López Obrador ya comenzó a decir que su sexenio es más corto que los anteriores. En una aviso adelantado de que no abandona la idea de la reelección, se queja de que “le quitarán” dos meses de mandato.

Como sea sabemos que, más allá de la elección, él querrá mantenerse en el poder al menos hasta el primero de diciembre de 2024... Luego, de preferencia, a través de su sucesor. Y es que no habrá avances que entregar a la nación cuando termine su mandato y sí mucho que evitar salga a la luz pública.

Cerrar cortinilla

La razón de la eterna campaña es esa: hablar del futuro para no entregar resultados, para enviar el país al garete, para culpar al pasado de las desgracias (el último episodio protagonizado por Epigmenio Ibarra en contra del ex presidente Felipe Calderón, además de ridículo, raya en lo demencial) y para descalificar a quienes señalamos sus errores.

Han bajado de manera definitiva la cortina de sus funciones, del trabajo que deberían realizar para dedicarse de lleno a la grilla. Al puro circo. Panem et circenses, con todo y la prima adicional de la sangre regada de cientos de miles de inocentes.

Esta competencia —en su más reciente fase muy adelantada— oculta o distrae de los problemas del país, de una mortandad superior al promedio, de los ejecutados a plena luz del día, de los feminicidios que ocurren a diario, del desabasto de medicamentos, cupo en hospitales y equipo médico, de los niños con cáncer sin tratamiento, del aumento de los precios...

“¡Ave AMLO! Los que vamos de campaña te saludamos, mientras otros son los que mueren”. Porque los morenistas, los que están en campaña, se distraen de sus funciones. Han contribuido a la pérdida de vidas, a una transformación para peor, a un gobierno que ha hecho de todo menos gobernar.