En política no hay coincidencias. El mismo lunes que el mandatario sinaloense en su semanera hacia los señalamientos al PAS y la UAS, el presidente López Obrador en su mañanera arremetió contra los cacicazgos y la corrupción que impera en las universidades públicas de todo el país. El tabasqueño no dio nombres. Pero en Sinaloa sabemos bien que existe un aludido.

El Dr. Rubén Rocha Moya aterriza a la perfección el discurso presidencial. Adopta y adapta la directriz de Palacio Nacional. Inclusive maneja el timing político con oportunidad y pericia.

Pudiera pensarse que la ya insulsa intromisión del PAS en el proceso interno de Morena en Sinaloa es poca cosa en el plano nacional. Pero, tal vez, y sólo tal vez, el hecho trae consigo el momento adecuado de destapar una cloaca al interior de los claustros públicos ocupados por diferentes caciques.

Los hechos son, que los consejeros del PAS electos en Morena han quedado descalificados. El otro hecho es, que AMLO ya trae en agenda la reforma a las leyes que competen a las universidades públicas. El asunto no está suelto, está siendo operado de manera quirúrgica. Una más, el Congreso del Estado a través del líder de la JUCOPO adelantó la posibilidad de intervenir en el tema.

Don Jesús Madueña, habló. El rector de la UAS por fin habló sobre los señalamientos en razón de que la institución educativa es sostén social, político y financiero del Partido Sinaloense. El jefe de Casa Rosalina eligió ganar tiempo en su declaración.

La sociedad sinaloense pudo considerar en algún momento que el rector quedaba en medio del fuego cruzado entre el gobernador Rocha Moya y Héctor Melesio Cuén. Con esta declaración el líder de la casa de estudios escogió el bando morado.

En su declaración le quitó hierros a la situación al decir que existen militantes de todos los partidos al interior del alma mater. Habría sido bueno escucharlo decir que analizará el tema con la seriedad que amerita.

Será la próxima semana. Cuando el decano celebre el acto de inauguración del nuevo ciclo escolar. El evento tendrá mensaje político. Es turno del rector enviar mensajes de buena voluntad en torno al respeto irrestricto de la autonomía universitaria.

En definitiva. A Cuén comienza a derrumbársele su castillo de naipes. El PAS ha perdido representantes populares y funcionarios que han renunciado a su militancia. No se le hizo tener delegados al interior de Morena y mucho menos incidir en la elección del dirigente estatal. Se encuentra ahora en la antesala de lo que debería ser la separación de la UAS.

Por cierto. Hoy visitan Sinaloa Delfina Gómez y Leticia Ramírez, la ex y la actual titular respectivamente de la SEP. Con el tema universitario en boga y el inicio de cursos. Una gira que viene ahora sí que “como anillo al dedo”.

Vanessa Félix | Twitter: @vanessafelixmx