En el sitio de internet de la Universidad del País Vasco encontré el siguiente apunte acerca de las conclusiones e interpretaciones en toda investigación científica. Aparece en un PDF con el título “El cuaderno de laboratorio”. El autor del escrito pregunta: “¿Se han obtenido los resultados esperados?”. Responde:

  • Si la respuesta es no: repite el experimento para cerciorarte de que, efectivamente, el resultado no se ajusta a la hipótesis”.
  • “¿He hecho algo mal?”.
  • “Comprueba que no te has saltado ningún paso del protocolo experimental y que el experimento se ha hecho tal y como se había planteado”.
  • ¿Merece la pena repetir el experimento? En la mayoría de los casos, la respuesta es que sí”.
  • “¿Por qué no salen las cosas como esperaba? Puede que el experimento esté mal diseñado”.
  • “Comprueba si tus resultados coinciden o no con los que hayan podido publicar otros investigadores”.

Encuestas, encuestas

Esta semana, después de la encuesta de Reforma se publicaron otras, en El Financiero y El País. Me ha llamado la atención la de Enkoll que ha difundido el periódico de España con operaciones crecientes en México.

Dejando de lado las enormes ventajas de Claudia Sheinbaum en todas las mediciones, lo destacable en el caso de Enkoll es que no coincide con otras encuestas (De las Heras Demotecnia, Covarrubias y Asociados, Buendía & Márquez, MetricsMx) en los porcentajes de preferencias electorales que daba a Samuel García, de Movimiento Ciudadano.

Si ya era excesivamente alto —y por lo tanto sospechoso de cuchareo— el 14% de las preferencias que ha dado Reforma a Samuel, el 17% de Enkoll me parece escandaloso. Y es que en las encuestas más serias, Sami estaba mucho más abajo:

  • Covarrubias, 5%
  • Buendía, 8%
  • MetricsMx, 9%
  • De las Heras, 6%.

El 17% de Enkoll prácticamente era empate de Samuel García con Xóchitl Gálvez en el segundo lugar de la contienda. De plano eso parece un favor al frustrado candidato de Movimiento Ciudadano. Así lo veo.

Vuelvo a lo citado al principio —lo que he tomado de la Universidad del País Vasco—, ¿no debió Enkoll repetir su experimento ya que no coincidía con otros publicados? Esta empresa de estudios demoscópicos tendrá que ser muy cuidadosa ya que ha fallado en otras ocasiones.

Me consta lo que hace MetricsMx, casa encuestadora que ha sido muy acertada en tres procesos electorales consecutivos: repite la medición si el resultado no parece lógico. Si en la repetición se confirma la observación que se ve extraña, pues qué bueno. Si no, se realiza un tercer cálculo.

Quizá MetricsMx pueda hacerlo porque su metodología no es tan costosa como la de encuestar en vivienda, pero ni hablar, en el caso de El País, que es un negocio poderoso, si ha decidido publicar estadísticas de preferencias electorales, deberá asumir el costo de hacerlo bien. Porque ya ha fallado, y eso no adorna a un diario español tan grande. Dinero tienen sus editores para no andarse con tacañerías metodológicas.

Independientemente de la forma en que la siguiente medición de Enkoll distribuirá los supuestos 17 puntos de Samuel —insisto, para mi gusto es un dato infladísimo—, ahora mismo alimenta los alegatos de quienes en los medios simpatizan con la candidata X, como Héctor Aguilar Camín, de Milenio, un hombre que odia las encuestas que no reafirman sus prejuicios políticos y hasta comerciales: detesta a Morena y al presidente AMLO porque la 4T no ha tratado con amabilidad ni a don Héctor ni a una empresa suya, Nexos.

Antes de que Samuel se echara para atrás y abandonara la candidatura de Movimiento Ciudadano, Jorge Castañeda, amigo de Aguilar Camín —colabora en Nexos— decía correctamente, basado en las encuestas serias, que el esposo de Mariana Rodríguez no valía nada como candidato.

Esa era, naturalmente, la opinión de la derecha que está detrás de Xóchitl Gálvez y del frente PRI, PAN, PRD: que Samuel no había crecido en las encuestas, y era verdad.

Con Sami retirado, lo que a la derecha le conviene decir es que el frívolo gobernador de Nuevo León había crecido mucho y que, por lo tanto, muy pronto pasará sus puntos a la candidata X.

Las cosas en la realidad eran distintas. Samuel siempre fue la peor opción de MC. En el partido de Dante Delgado, en todo momento Luis Donaldo Colosio Riojas superaba tres a uno a Samuel García. Números superiores a los de Sami los tenía inclusive Marcelo Ebrard, cuando jugó al rebelde en Morena y fue considerado como posible aspirante de Movimiento Ciudadano.

Lo cierto es que la retirada de Sami dejará a MC con los pocos puntos que siempre ha tenido. Y su fracaso como candidato no alterará la contienda: Claudia Sheinbaum seguirá en primer lugar con ventajas enormes sobre Xóchitl Gálvez.

¿Hay tiempo para que las cosas cambien? Hoy en El Financiero, Pablo Hiriart, quien aborrece a Claudia, dice que en seis meses ocurrirá el milagro que la derecha espera. ¿Seis meses? No es así.

  • Lo que queda de diciembre y hasta después del seis de enero es un periodo perdido para las campañas: Santa Claus y los Reyes Magos ya son la prioridad de la gente.
  • El 19 de enero se suspenden las campañas y se entra en el limbo de las intercampañas —en el que las candidatas no podrán tener actividades—, lo que durará hasta el 1 de marzo.
  • Las campañas en forma durarán menos de 90 días, del 1 de marzo al 29 de mayo.
  • Son 90 días en los que puede reducirse la ventaja de Claudia… o puede incrementarse. Tal como se han desarrollado las cosas hasta hoy, veo más probable el fortalecimiento de la seria Sheinbaum que su debilitamiento frente a la candidata X que nomás no sabe expresarse sin albures vulgares.

Dijo hoy Aguilar Camín en Milenio que el arroz está crudo. Yo lo veo bastante cocido. Crudo quizá quien entregó al columnista elementos para su análisis. Moraleja, don Héctor: No conviene hacer caso a las personas que presumen sapiencia estadística después de una francachela de aquellas.