“El mayor dolor del mundo no es el que mata de un golpe, sino aquel que, gota a gota, horada el alma y la rompe.”
FRANCISCO VILLAESPESA
El peluche del Dr. Simi es famoso por mérito propio. Representa a una cadena de farmacias que vende medicamentos genéricos a precios accesibles y también a una empresa —única en el continente— que da trabajo a personas con algún tipo de discapacidad. CINIA, donde se fabrican, tiene un anuncio en su recepción que advierte: “en esta empresa se admite cualquier tipo de discapacidad menos la flojera”.
Sería increíble y altamente beneficio que en nuestro país hiciéramos eco a dicha propuesta. Personas que, mismo teniendo que enfrentar adversidades, no ponen pretextos —ni culpan al pasado— cuando se trata de trabajar. Una empresa que les hace saberse útiles; que no va tras donativos y sí, en cambio, en busca de trabajo y compradores para sus productos.
Cuando Farmacias de Similares inquirió si podían elaborar el famoso Dr. Simi en CINIA, muchas personas con algún tipo de discapacidad entraron al quite. En su vocabulario no existe la palabra “imposible”; hay que verlos trabajar para entenderlo.
Otra persona que tampoco entiende la palabra “imposible” es el fundador de Farmacias de Similares, Víctor González Torres, quien decidió que se podían vender medicinas a precios accesibles. Cuando nadie creyó en él, estableció un negocio que hoy —transformado en cadena— apoya a millones de mexicanos; él sí, a quien más lo necesita...
Así, ese muñequito hecho con cariño y profesionalismo por muchos mexicanos capaces, contratados por una empresa que cree en ellos y por otra que también apuesta por ellos llegó un día a los conciertos —ahora hasta a los funerales— y de allí en adelante la historia que ya todos conocemos.
Por supuesto, una cosa es lanzar un Dr. Simi lleno de amor al artista favorito y otra los lanzamientos a políticos desastrosos. ¡Cómo olvidar aquel periodista iraquí quien, en 2008, le lanzó sus dos zapatos a George Bush Jr!
Huevazos han recibido una larga lista de figuras políticas. Desde el primer ministro de Australia, Scott Morrison, hasta Mario Delgado (aquella vez de visita en Durango). Pero la verdad es que dada la austeridad republicana de contar con un solo par de zapatos y la inflación con su alto precio de los huevos, pues en México eso no resulta.
Ergo, sin que necesariamente sea lanzar al simpático Dr. Simi, zapatos o huevos, lo cierto es que en México hay una larga lista de políticos que se merecen un descontón (temporal y virtual) con algún objeto volador que no lastime, tipo el mencionado peluche. Mientras los artistas y cantantes los reciben como reconocimiento, los políticos deberían recibirlos como una muestra de desprecio.
Obviamente existe una larga lista de candidatos de todas las denominaciones partidistas. Aquí una somera relación de quienes, pertenecientes a la 4T, podrían merecer un descontón del Dr. Simi:
- Hugo López-Gatell. Sin duda de los peores “zares” anti Covid en el mundo. Un descontón por cada muerto producto de su pésima estrategia, de su tardanza con las vacunas o en razón del desabasto de medicinas.
- Mario Delgado, quien tanto habló en contra de la militarización del país y que ahora la defiende. Otro más por el desaseo en las elecciones internas en Morena; por cada morenista por él burlado.
- Andrés Manuel López Obrador, por ser el rey de las mentiras, medias verdades y de los otros datos. Por dejarse acompañar de un grupo de floreros y no de un gabinete de funcionarios responsables. Ello entre otras muchas, muchas, razones.
- Alejandro Gertz Manero lo merece por cada una de las personas que ha mandado sin pruebas a prisión -esto es, torciendo o saltándose la ley-. Por usar la Fiscalía General de la República como herramienta de su venganza personal.
- Cuitláhuac García y Cuauhtémoc Blanco, por ser de los peores gobernadores de toda la república. Eso además de llevar de manera vergonzosa dos nombres históricos (pasarán a la historia, pero al basurero de la misma).
- Jenaro Villamil, el presidente del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano, confundiendo la comunicación con el adoctrinamiento.
- Paco Ignacio Taibo II, por ser un apache (eso dijo él mismo explicando su florido lenguaje), soez y aprovechado. Quien siendo director del FCE compró a sus amigos una colección de libros de hace 30 años que él editó y no se vendió. Eso y por destruir en el proceso a una de las instituciones más serias y reconocidas a nivel mundial como es el Fondo de Cultura Económica.
- Bartlett, merecería muchos descontones: uno por cada una de sus 23 casas —que no son de él, pero parecen de él—; por su pésima gestión de la CFE y los apagones que van en aumento en toda la república. Por su torva necedad de ir en contra de las energías limpias y comprar carbón. Por su corresponsabilidad en la muerte de los mineros en Coahuila.
- Layda Sansores, desde que su tinte de pelo lo pagan nuestros impuestos, pasando por su gestión en la Álvaro Obregón, sin olvidar su golpeteo dIfundiendo ilegalmente audios obtenidos también ilegalmente de Alejandro Moreno.
- Rocío Nahle, por ser la responsable de uno de los peores ecocidios en este sexenio: la desaparición de los manglares en Tabasco, sin olvidar la contaminación en el mediano y largo plazo por negarse a invertir en energías limpias y apostar por el vetusto petróleo. Por lograr que la refinería Dos Bocas ya tenga a la fecha un costo acumulado del doble de lo que se presupuestó.
- Los irresponsables del Tren Maya, un proyecto sin estudios, destruyendo selva, hábitats, cenotes, con costos exorbitantes, dejando una estela de muerte en su trazo.
- Y Alito Moreno. Sí, sé que dije que hoy solo incluiría a algunos de la Cuarta Transformación. Pero visto el cambio de decisión de este dirigente partidista, a raíz del cual la 4T lo abraza, felicita y acoge, merece ser mencionado.
Obviamente hay muchos más. Estos son solo algunos de los que merecen un descontón (ya dije, virtual). Se lo han ganado a pulso.