Seguramente ha escuchado a los políticos hablar del “nearshoring”. Que con la ventaja que tenemos de estar a un lado de unos de los mercados de consumo mas grandes del mundo, representa una gran ventaja para el desarrollo.

Según las definiciones de nearshoring que he encontrado en la red, el nearshoring es la estrategia de externalización por la que una empresa transfiere parte de su producción a terceros que, a pesar de ubicarse en otros países, están localizados en destinos cercanos y con una zona horaria semejante.

El nearshoring es la respuesta al offshoring buscando que los proveedores estén en otros destinos específicamente fuera de Asia. Tener los productos mas cerca de los centros de consumo hacen que muchos de los costos logísticos puedan disminuir. Esto es ventaja para los centros de consumo, ¿pero será lo mismo para los países donde se lleva a cabo el nearshoring?

La reducción en costos de producción, una mano de obra calificada y los tratados de libre comercio son factores que hacen que el offshoring sea una mejor alternativa que los modelos de globalización anteriores. Hubo un tiempo donde se buscaba la mano de obra mas barata para lograr una ventaja competitiva y esto se lograba en China que al mismo tiempo que tenia una gran parte de los procesos productivos del mundo, aprendía para poder hacer los suyos. Los chinos pasaron de ser los grandes imitadores a los grandes desarrolladores compitiendo con productos iguales o mejores a los que se fabricaban.

Las políticas contra mercado chino del expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, pueden ser una de las causas por las que Estados Unidos este volteando de nuevo a México, invirtiendo en nuevas plantas y desarrollos en nuestro país, y atrayendo a todos los proveedores de componentes.

México, desde hace muchos años, ha apostado su modelo de desarrollo económico para integrarse con el mercado estadounidense. Estados Unidos busco proveedores fuera del continente, pero ahora esta volviendo hacia América, específicamente México para que vuelva a ser el productor.

El gran pecado o error de los políticos en México es que atraer todo ese tipo de inversiones solo nos hace seguir siendo el proveedor de servicios del vecino y no el desarrollador de tecnología propia. Haciendo una analogía, seguimos teniendo el estigma de ser un país conquistado por rubios barbudos que intercambian la riqueza de nuestro país por espejitos.

Claro que las inversiones extranjeras dan trabajo y sostén económico al país. Claro que traen dinero y prosperidad, pero siempre un escalón debajo de lo que tienen los países que son los compradores. El modelo de nearshoring deja de ser sostenible cuando los trabajadores del país al que llevan las fabricas tienen sueldos similares a los de los países de origen. El trabajador estadounidense de la planta de automóviles siempre tendrá mejores beneficios económicos que el trabajador mexicano de la misma planta.

En alguna ocasión trabaje en una compañía estadounidense que, aunque fue en el sector financiero, tenían un ajuste de salarios por país. Cuando iba a visitar las oficinas en Estados Unidos notaba la diferencia de salarios de los mandos intermedios de México contra los de Estados Unidos. Los mismos gringos nos decían que no entendían porque los salarios eran mas bajos en México que en Estados Unidos si hacían la misma función. Y eso fue en el sector financiero. Imagine esto en el sector de manufactura, es todavía peor.

¿Porque los políticos piensan primero en la inversión de otros países antes de la inversión en el desarrollo de tecnología en nuestro país? Porque en lo primero, las ganancias no se ven en el corto plazo, se ven a futuro. Puede ser que esas inversiones no traigan los beneficios esperados dentro de su periodo gubernamental, lo que hará que el siguiente o el que sigue del siguiente, se cuelgue las medallas. Si en nuestro país nuestros gobernantes fueran menos ególatras, seguramente estaríamos mucho mejor.

Ayer le comentaba de la diferencia entre los coreanos y nosotros, si hace 50 años los gobernantes en lugar de pensar en ellos mismos hubieran pensado en el desarrollo del país, otro gallo nos cantaría. Quien sabe si otros países nos estuvieran buscando para que hiciéramos nearshoring o algún tipo de desarrollo con ellos en lugar de que nosotros estuviéramos saliendo al extranjero a buscar recursos.

Esperemos que estas nuevas inversiones traigan los recursos para desarrollar tecnología y productos en las próximas generaciones. Esperemos que los próximos gobernantes tengan un perfil mas de investigador y desarrollador que de administradores.