CENTRO A LA OLLA

Cada torneo que va a iniciar es lo mismo: ¿Cuáles son los favoritos?, ¿quiénes clasificarán directo?, ¿está tal o cual equipo entre los candidatos al campeonato?… Total que muy pocas veces hay quien le “atina”, así como se lee, le atina al club que al final resulta el ganador.

Y no se trata de si existe o no profundidad en el análisis de los equipos previo al arranque de los torneos. Las fallas y el ridículo que muchas veces hacemos poniendo a uno u otro de favorito, va más por la inconsistencia que muestran la mayoría de los equipos en México, incluidos los que en los últimos torneo se han adueñado de esos lugares de “grandes candidatos” al título.

Desde hace unos años a la fecha, cuando se realiza este ejercicio se suele mencionar a América, Monterrey y Tigres. En el orden que se quiera, pero siempre están presentes. Luego vendrán otros como por ejemplo ahora Pachuca, que como campeón defensor y por el trabajo de continuidad que tiene, se meten esa lista.

Pero seamos sinceros, hace tres torneos nadie, fuera de los aficionados del Atlas, tenía en el radar al equipo Rojinegro para salir campeón y lo logró. Incluso fue bicampeón, aunque ya para ese segundo trofeo que obtuvieron, ya hubo varios que se subieron al barco, se fueron a la fácil.

Pareciera que confundimos el ser realmente un favorito con la obligación que le marca a ciertos clubes su jerarquía, historia o la fuerte inversión que hacen sus directivas cada torneo para tratar de tener la mejor plantilla posible.

En esa confusión siempre ponemos a los mismos y cuando se trata del porrismo con micrófono, por qué no, metemos al equipo al que le vamos ya sea por convicción o por quedar bien, como por ejemplo ha pasado mucho últimamente con la fuente de las Chivas. Ahora resulta que si no pones de candidato o no hablas bien de un equipo o de los movimientos que ha hecho, altas, bajas, jugadores de fuerzas básicas, o no sabes de futbol.

Y lo pongo así, en tercera persona, porque en algún momento todos hemos caído en lo mismo, todos los que estamos de este lado desde donde buscamos dar un panorama de lo que vemos en cuanto a planeación, preparación y ejecución de los clubes.

Arranca el Clausura 2023 y no hay favoritos para el título. Hay equipos mejores armados que otro. Hay equipos mejores trabajados que otros y hay equipos que desde lo que mostraron en la pretemporada (que para muchos todavía no acaba y hasta seguirán contratando jugadores) han ilusionado a su afición, pero nada más. El juego de quién es el favorito ya resulta más aburrido que muchos partidos de la misma Liga MX.