Sonora Power

Lo publiqué aquí el 24 de noviembre: Arturo Herrera le adelantó participaciones federales a la ex gobernadora de Sonora, Claudia Pavlovich Arellano, por 2 mil 400 millones de pesos y que eso le causó severos dolores de cabeza al naciente gobierno de Alfonso Durazo Montaño en la entidad.

Esos recursos que se pidieron en mayo, marcaron una diferencia profunda entre la posibilidad de un arranque a paso veloz y un tortuoso proceso de salida. Al nuevo gobierno de Sonora hasta este mes de diciembre le estuvieron descontando 487 millones de pesos mensuales, es decir los dejaron sin un peso para operar y encima les obligaron a pedir un préstamo de corto plazo por 1 mil 800 millones de pesos.

Todo esto por el manejo irresponsable de las finanzas públicas en que incurrió el gobierno saliente, en especial el equipo de Raúl Navarro Gallegos, ex secretario de Hacienda, pero que fueron favores pedidos expresamente por la ex gobernadora Claudia Pavlovich a Arturo Herrera, quien cedió de manera irresponsable al capricho, y no solamente de la gobernadora sonorense.

El presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó todo el suceso y le puso aderezo, resulta que no solo era en Sonora, ocurrió en prácticamente todos los estados donde Morena y el proyecto de la 4T asumieron el gobierno, pasando por Sonora y siguiendo en Nayarit, Zacatecas, Campeche, Baja California Sur, Chihuahua (aquí la transición fue del PAN al PAN, y no importó) Colima, Guerrero, Michoacán, San Luis Potosí, Nuevo León y así sin parar, con gobiernos salientes irresponsables, que paradójicamente se pararon el cuello como los más pulcros y limpios en el manejo financiero.

“Es un caso, por ejemplo, de Colima, que en tres meses sólo le dejó a la nueva gobernadora el cinco por ciento de las participaciones, o sea, si le correspondían a Colima en los tres meses, qué sé yo, mil millones de pesos, le dejó 50. Por eso hemos tenido que ayudar, sobre todo para el pago de nóminas”

AMLO

De hecho el presidente López Obrador apuntó que esta situación resultó hasta curiosa de tan repetitiva que era, y la verdad es que ahora no me cabe duda alguna de que fue la causa por la que este 1 de enero tomará posesión como integrante de la Junta de Gobierno del Banco de México Victoria Rodríguez Ceja y no Arturo Herrera, que es al final de cuentas el que autorizó ese manejo irregular.

Es decir los gobernadores salientes del PRI y el PAN, en acuerdo con el Secretario de Hacienda, se asociaron para saquear las finanzas de sus estados aún incluso más allá de sus mandatos.

En el caso de Sonora lo sabemos, el gobierno del PRI no dejó para la nómina, no pagó las pensiones, dejó el sistema de salud sin medicinas y en la quiebra, dejó destrozadas las escuelas y encima provocó un colapso en la operatividad del gobierno de su sucesor, que a la fecha sigue sin ser del todo resuelta, pues ahora habrá que pagar durante todo el 2022 los platos rotos, con un crédito de 1 mil 800 millones por pagar, ya que el apoyo de emergencia de la federación, alcanzó si para pagar la nómina y las pensiones, pero nada más.

López Obrado abundó en detalles y dijo que los exgobernadores cayeron en el exceso de usar los anticipos para pagar deudas con proveedores (la mayor parte contratistas amigos, cuando no socios), y dejando al gobierno que entra sin dinero ni para pagar la nómina, en un modus operandi que parece diseñado para repetirlo y repetirlo.

La recomendación del presidente fue aquí seguir saneando las finanzas estatales e incluso consideró que hay ahora conciencia entre los nuevos gobernadores, que recibieron las cuentas en sus entidades literalmente en estado de ruina.

Ahora resulta paradójico que en este caso algunos de los ex gobernadores pretendan ahora subirse al tren de la 4T para asumir posiciones ya sea en el gabinete o como diplomáticos, como se ha insinuado en el caso de la ex gobernadora de Sonora (de quien se habla como candidata para ser Cónsul General de México en Barcelona), cuando en realidad debieran de estar bajo fuertes auditorías por su proceder, cuando no bajo proceso por el manejo irresponsable de las finanzas públicas y por casos de enriquecimiento, en este caso muy explicable.

López Obrador recalcó que ahora los nuevos gobernadores promueven en sus estados leyes de austeridad, y que incluso buscan recortarles los sueldos a sus colaboradores y a los diputados, tal como ya sucedió en Sonora, sin embargo hay entidades en donde hay una autentica rebelión en la granja, pues los legisladores acostumbrados a los sueldos millonarios y las prebendas, no se quieren dejar.

En Sonora, debo decirlo, Alfonso Durazo propuso un recorte al Poder Legislativo, mismo que fue por 400 millones de pesos y el Congreso de Sonora de ser el cuarto más oneroso del país, bajó de 732 millones de pesos a 332 millones previstos en el presupuesto del 2022, sin embargo al ser el estado donde se descubrieron los escasos y el modus operandi de la mafia gubernativa que controlaba estos territorios a los que llegó la 4T.

El detalle es que no en todos los estados se lograron los cambios de fondo que ya consiguió en mi tierra la mayoría de la 4T, porque hay alcaldes, diputados y regidores que se resisten a que les amarren las manos.

Demian Duarte en Twitter: @Demiandu

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