Cuando hace unas semanas el presidente de Grupo Pachuca, Jesús Martínez, aseguró que volvería a llevar las votaciones para el Salón de la Fama a España a más de un “periodista” le brillaron los ojitos por el viaje.
Hay que recordar que la última votación se llevó a cabo en Madrid y muchos representantes de los medios fueron invitados con los gastos pagados para asistir a tan reluciente evento. Iban a muchos lados juntos, cenaban juntos (bueno, menos uno que lo hacía en una mesa aparte) y había una bonita convivencia.
Bueno, pues eso ahora no podrá ser en gran número como la ocasión anterior ahora que el Grupo de los Chuchos ha decidido solamente invitar (léase así para no decir que les pagan todo el viaje) a no más de cinco de los periodistas de su círculo más cercano, por lo que los demás que ya se hacían con otro viajecito a las Europas, ahora tendrán que pagar por ir.
Aquí veo dos problemas :
El primero, que Pachuca me malacostumbró a varios a las “invitaciones” a muchos de sus eventos y ahora tendrá que aguantar vara por aquello de que puede haber uno que se moleste y quiera despepitar, y hasta sacar algún trapito al sol. Ya saben que el despecho es canijo.
Y el segundo y más grave, que a estas alturas sigan esas prácticas por parte de los “periodistas”, viejos y nuevos, de aceptar este tipo de “invitaciones” (insisto en el término), que después piensan que son una obligación del club y hasta hay quien las exige y se indigna si no se las hacen. Eso es peor por dónde se le vea.
Así que si usted lee, escucha o ve a algunos personajes tirándole o sin pelar la información del Salón de la Fama y su siguiente votación en Oviedo, España, no diga que no le avisé que es más un despecho que una línea editorial dura.