La periodista Viri Ríos, en Milenio, publicó un interesante artículo acerca del desastre que es la campaña del frente PRI, PAN, PRD: “Es culpa de Xóchitl, ahora resulta”. Viri defiende a Xóchitl Gálvez, y qué bueno que lo haga.

La columnista, antes de explicar que la candidata de la derecha no es la causante de sus lamentables números de preferencias electorales, realizó un diagnóstico certero acerca de tan fallida campaña:

  • “Xóchitl no pega”, ha afirmado la colaboradora de Milenio. Y es verdad, no pega.
  • “La encuesta más reciente la deja 30 puntos abajo de Claudia”. Se refiere la señora Ríos a la encuesta de Buendía & Márquez publicada en El Universal, que coincide con dos mediciones de MetricsMx, empresa que da a conocer sus resultados en SDPNoticias. La columnista no los destaca, pero me parecen más interesantes los datos de otras dos encuestas, aplicadas en vivienda, la de Covarrubias y Asociados (difundida en La Vanguardia, de Barcelona, España) y la de De las Heras Demotecnia (en su pagina de internet). Covarrubias le da a Sheinbaum una ventaja de 47 puntos y De las Heras de 54. Números impresionantes de dos casas encuestadoras de gran prestigio.
  • “Peor aún”, dice Viri Ríos, los negativos de Xóchitl suben: “En junio tenía tres puntos negativos más que Claudia, ahora tiene nueve”.

Objetivamente hablando más o menos tales son las estadísticas que retratan el derrumbamiento no solo de Xóchitl Gálvez, sino también de los tres partidos del Frente Amplio por México y de la gente de empresa que tanto la promueve.

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¿Quién tiene la culpa? A Viri le parece injusto que el PRI y el PAN culpen a Xóchitl. Estos partidos, y no pocos analistas, justifican la ruina de su candidatura diciendo:

  • Que Xóchitl “no tiene la altura para ser presidenta”.
  • Que la senadora Gálvez falla porque “fuera de la historia de las gelatinas, no tiene una agenda de gobierno”.
  • Que el hundimiento en las encuestas se debe a que la campaña de Xóchitl “no tiene coordinador o tiene demasiados”.
  • Que la candidata se equivoca por estar “muy cerca del PAN-PRI, o muy lejos”.
  • Que el error es hacer “demasiada campaña de tierra, o demasiada de aire”.
  • Que Xóchitl “no trabaja en serio”.

Viri Ríos no acepta que se culpe a Xóchitl Gálvez, que “es lo mejor que le pudo haber pasado al PRI-PAN”. Los que han fallado, sostiene la columnista, han sido el PRI y el PAN y sus equipos de publicistas empresariales. “A Xóchitl la destruyeron a fuego lento, en tres pasos”:

  • “Primero, en un país donde la mayoría siente disgusto por el PRI y el PAN, los partidos la enmarcaron como uno de ellos… El PRI la llevó a tomarse fotos con los políticos peor evaluados del país. El PAN hizo que se desdijera de su agenda de género y matrimonio igualitario”.
  • “Segundo, en un México donde la mayoría siente apego a AMLO, la sociedad civil (Viri la llama la falsedad civil) la disfrazó de anti-AMLO. Acentuaron a la Xóchitl confrontativa, elitista y pro-empresarial”.
  • Tercero, “un publicista le vendió la misma campaña de ‘viaje’ que convirtió a Ricardo Anaya en un meme. Ahí la vemos ahora, viajando para dormir en casas ajenas de familias de bajos recursos. En sus videos se ha visto cómo, a veces, la familia ni se acuerda del nombre de Xóchitl”.

Antes de terminar su artículo Viri Ríos dice, correctamente en mi opinión, que “para la ciudadanía, el partido hegemónico sigue siendo el PRI-PAN” porque “para las mayorías Morena es más opositor que el PRI-PAN por el simple hecho de que ha gobernado menos tiempo”.

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Por lo demás, la columnista del diario de Pancho González concluye afirmando que “Movimiento Ciudadano es el único futuro opositor, aunque el PRI-PAN se rehúsen a verlo”.

Coincide el anterior juicio sobre MC con lo que me dijo un encuestador experimentado: Si fueran inteligentes quienes mandan en el frente PRI, PAN, PRD destruirían esta alianza, ya que no suma, sino resta. Los dos primeros partidos, que son los importantes, tendrían un mejor resultado si:

  • El PRI compitiera solo con Beatriz Paredes como candidata.
  • Al PAN lo representara Lilly Téllez en las elecciones de 2024, o bien que el partido conservador se uniera a MC postulando a Samuel García.

¿Y Xóchitl? ¿Qué debería hacer ella en el escenario de la extinción del frente PRI, PAN, PRD? Olvidarse de la contienda presidencial porque en la misma ya no va a tener éxito. No saldrá de sus problemas negando la realidad, que es lo que hizo recientemente ante un grupo de empresarios a quienes pidió ignorar las encuestas que le dan grandes ventajas a Claudia. Gálvez debería hacer otra cosa: volver a su plan original, esto es, buscar participar en la elección en la que sí tenía posibilidades de ganar —no es seguro que las conserve, pero algo de fortaleza le quedará para aspirar a— la jefatura de gobierno de la CDMX.

En fin, Viri Ríos diagnostica el desastre de la campaña de Xóchitl Gálvez y encuentra a los culpables, el PRI y el PAN y los publicistas empresariales que le impusieron seguramente desde las oficinas de Claudio X. González.

La dureza de los puertos de montaña

Si algo le faltó al artículo de la señora Ríos fue analizar lo que hace la competencia. Vayamos al ejemplo del Tour de Francia, carrera ciclista de tres semanas en la que normalmente resulta campeón quien tiene mejor desempeño en los durísimos puertos de montaña en los Alpes y los Pirineos.

La dureza de los pasos montañosos se calcula con una fórmula sencilla: “Desnivel medio al cuadrado por kilómetros de ascensión”. Este año, en el Tour de Francia hubo más de 30 subidas durísimas. Las más difíciles fueron el Col de la Loze, con 28.1 kilómetros de ascensión al 6%, después el Tourmalet (17.1 km al 7.3%) y enseguida el Grand Colombier (17.4 km al 7.1%).

En el Tour 2023 uno de los grandes favoritos, Tadej Pogačar, sufrió un terrible desfallecimiento en el Col de la Loze. Ahí definitivamente perdió el Tour y lo ganó Jonas Vingegaard.

El que se agotó en la tremenda ascensión fue el esloveno Pogačar, pero ¿fue solo su culpa? En cierto sentido sí porque quizá no debió participar en el Tour de Francia después de haber sufrido una fractura tres meses antes que lo dejó semanas sin entrenar. Pero, como quiera que sea, quedó en segundo lugar al final de la carrera. Sin un rival tan fuerte como Vingegaard, casi seguramente Pogačar habría ganado el Tour. Si desfalleció en la etapa del Col de la Loze fue por todo lo que hizo Vingegaard antes de ese puerto de montaña, sobre todo por la enorme ventaja que obtuvo un día antes, en la contrarreloj.

¿Vingegaard ganó el Tour de Francia 2023 porque Pogačar, mal preparado, desfalleció o, más bien, Pogačar desfalleció porque se vio obligado a dar más de lo que podía por causa de la extraordinaria actuación de su rival?

En el caso de la contienda presidencial mexicana de 2024 creo que, además de las metidas de pata de los asesores de Xóchitl Gálvez —PRI y PAN incluidos—, la ventaja de Claudia Sheinbaum es tan grande porque la candidata de Morena ha acelerado fuertísimo en la parte más dura de la campaña, la larguísima cuesta inicial, y la otra simple y sencillamente no ha tenido potencia para seguirla.

Es decir, en la crisis de Xóchitl y del FAM mucho mérito tendrá Claudia, ¿o no le parece así a Viri Ríos?