Curiosa la columna “Salmerón y las intrigas contra Ebrard” de Ricardo Raphael en Milenio. Veamos lo que dice:

1.- Que el gobierno de Panamá no quiere que el historiador Pedro Salmerón sea el embajador de México en ese país.

2.- Que la feminista Erika Mouynes, canciller panameña, ya lo hizo saber a su homólogo mexicano Marcelo Ebrard.

3.- Que el rechazo a Salmerón no se ha hecho público porque es un asunto que se ha vuelto muy relevante para el presidente López Obrador, y por lo mismo el gobierno de México busca que el de Panamá reconsidere y termine por aceptar al historiador.

4.- Que Marcelo Ebrard es el menos interesado en que Pedro Salmerón “reciba el beneplácito” panameño.

5.- Que Ebrard está enojado con Salmerón porque este cuestionó muy fuertemente un nombramiento de la cancillería: el de Brenda Lozano como agregada cultural de México en España.

6.- Que el enojo de Ebrard es muy fuerte porque las críticas a la señora Lozano provocaron “la infausta renuncia de Enrique Márquez, titular del área cultural en la SRE y uno de los colaboradores más próximos al corazón del canciller Ebrard”.

7.- Que con la instrucción presidencial de que Salmerón sea embajador en Panamá, el canciller Ebrard tuvo que tragar mierda y nombrarlo.

8.- Que “ahora que el gobierno panameño ladea en sentido negativo la cabeza, la cancillería tendría en sus manos la revancha, o bien el mérito de haber conseguido satisfacer el capricho presidencial”.

9.- Que “el caso Salmerón se volvió un escándalo por las acusaciones de acoso que pesan en su contra, pero también porque ha sido pieza de una vehemente intriga entre la cancillería y los habitantes del Palacio Nacional”.

10.- Que si entendí bien todo lo anterior, el artículo de Ricardo Raphael debería titularse: “Salmerón y las intrigas de Ebrard contra los habitantes de Palacio Nacional”.

11.- Ello porque, del escrito del colaborador de Milenio, puede concluirse que fue el propio Marcelo Ebrard quien maniobró para que la canciller Panameña rechazara a Pedro Salmerón.

12.- En este asunto de pura grilla Ebrard gana cualquiera que sea el desenlace: si el rechazo a Salmerón se mantiene, hará feliz al canciller mexicano, quien de esa manera se vengará de lo que hizo el historiador en el caso Brenda Lozano; si el rechazo se elimina, Ebrard quedará como el héroe que hizo posible el nombramiento que AMLO tanto ha defendido.