Claudia Sheinbaum se reunió con las gobernadoras de Morena. Son muchas, sin duda.

Nunca tantas mujeres habían ganado gubernaturas mexicanas. ¡Y casi todas militan en Morena! Estamos ante un hecho histórico que ¿anuncia un futuro femenino para México?

Hay que plantar la anterior pregunta de otro modo: ¿en 2024 podrán las mujeres derrotar a la perversidad masculina que tratará de quedarse con la presidencia de México, ya sea desde Morena o desde la oposición? No es un reto menor, por supuesto que no. Ya se verá de qué tamaño es el cambio que ofrece la izquierda mexicana.

La oposición tiene una gobernadora, que pronto dejará de serlo, la priista Claudia Pavlovich, de Sonora. Ello significa que la oposición seguirá con solo una mujer en el gobierno, Maru Campos, panista gobernadora Electra de Chihuahua.

¿Le alcanza a Maru para buscar la presidencia de México en 2021? No parece tener tiempo.

¿Se atreverá Pavlovich a buscar nueva vida política en 2024? Dependerá de lo que encuentre en sus cuentas el nuevo gobernador sonorense, Alfonso Durazo.

¿Tiene la derecha representación femenina poderosa para las próximas elecciones presidenciales? Solo se ven con cierta fuerza Margarita Zavala, ex panista, y Xóchitl Gálvez, todavía militante del PAN. El problema para la oposición a Morena es que Margarita ya tuvo su oportunidad en 2018, y le fue tan mal que tuvo que dejar la candidatura. Y Xóchitl parece empeñada en irse por la ruta que ella considera más sencilla, la de intentar quedarse con la jefatura de gobierno capitalina.

¿Ivonne Ortega, expriista, hoy en Movimiento Ciudadano? Soñó con ser presidenta el pasado sexenio y el PRI no la tomó en cuenta. Se rebeló, pero demasiado tarde y no creció. Desde entonces ha aparecido solo esporádicamente en la escena política, así que ha perdido relevancia.

Hay más mujeres en el Senado, en la Cámara de Diputados, en el gabinete, ojalá alguna crezca.

Lo que sea, el futuro político de México luce femenino.