México.- No hay persecución política contra Jorge López Portillo Basave, exdirector general de la empresa paraestatal Exportadora de Sal, SA (Essa) y sujeto a un proceso judicial.

Así lo aclaró la Secretaría de Economía (SE), quien “rechazó rotundamente” las acusaciones que hizo Portillo Basave, en cuanto a que su caso “es una persecución política y económica de diversos funcionarios federales”.

En este contexto, la dependencia precisó todas las irregularidades que cometió en su gestión entre 2013 y 2014.

Hace casi una semana, agentes de la Procuraduría General de la República (PGR) detuvieron a Portillo Basave, quien quedó libre horas después tras el pago de una fianza.

El exdirector se dijo “perseguido político de quienes pretenden continuar aprovechándose de esa extraña relación que existe en la empresa Exportadora de Sal, donde existen funcionarios propuestos por la empresa Mitsubishi y designados por el gobierno de México”.

Incluso, responsabilizó de cualquier cosa que pueda sucederle a él o a su familia a Ildefonso Guajardo, titular de la SE, y a Herminio Blanco, asesor tanto de la dependencia como de la firma japonesa Mitsubishi, que forma parte del consejo de administración de la misma paraestatal.

La SE indicó que esas acusaciones “tendrá que demostrarlas ante la autoridad competente”.

Asimismo, destacó que “el Poder Judicial dictó auto de formal prisión al ex director, lo que implica que este órgano independiente encontró suficientes elementos para considerarlo presunto responsable de actos de corrupción”.

Recordó que López Portillo Basave ya fue sancionado por 150 millones de pesos e inhabilitado por 10 años para ejercer un cargo público por la Secretaría de la Función Publica (SFP).

De acuerdo con la SE, el proceso judicial contra López Portillo se dio por la venta de salmuera residual sin contar con precios autorizados por el consejo de administración de Essa, como marca la ley, y se le detectaron otras irregularidades a partir de diversas auditorías y procedimientos de control y vigilancia.

Fue destituido López Portillo Basave como director de Essa debió a que adquirió “una embarcación (barcaza) de 15 mil toneladas métricas para la transportación de sal, por 27.2 millones de dólares, sin autorización del consejo de administración”, cuando sólo se le había autorizado realizar estudios técnicos para valorar la conveniencia de comprar una embarcación con capacidad de 10 mil toneladas métricas, con un costo estimado originalmente en 6.8 millones de dólares.