La prima de riesgo de España, que hoy alcanzó durante la sesión los 612,5 puntos básicos, un máximo histórico desde la creación del euro, terminó la jornada en 609,9 mientras que la rentabilidad del bono hispano la acabó en el 7,26 por ciento.
El sobrecoste que los inversores exigen por la compra de deuda soberana española en el mercado secundario se disparó después de que el rendimiento del bono alemán a diez años, cuyo diferencial con el español del mismo plazo mide el riesgo país, cayera con fuerza hoy hasta el 1.164 por ciento.
Al cierre de la sesión, el alemán acabo en el 1,167 por ciento.
Los analistas consultados por Efe evitaron dar una explicación concreta a cerca del repunte, si bien recordaron la presión que existe sobre los países europeos periféricos en el mercado de deuda en las últimas semanas y cómo España sufre especialmente estos miedos inversores, a pesar de las últimas medidas anticrisis tomadas por el Gobierno.