México.- Marcela Alemán, madre de Lya, una niña que fue violada en 2017, se amarró a una silla en la sede de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para exigir justicia por su hija.

Junto con al menos 15 personas, Marcela llegó al edificio en la calle República de Cuba, en el Centro Histórico, a las 16 horas y tomó una de las oficinas.

Marcela pide justicia para su hija Lya, quien en 2017, cuando tenía cuatro años y medio, fue violada por la psicóloga de la escuela privada Instituto Luis González Urbina, María Teresa de Jesús Rodríguez Galván, en San Luis Potosí.

La madre de la víctima de violación contó, de acuerdo a medios nacionales, que María Teresa de Jesús Rodríguez Galván vinculada a proceso un año y ocho meses, sin embargo, al final las autoridades determinaron que la carpeta de investigación estaba mal integrada y salió libre.

Recordó que cuando fue la audiencia contra la psicóloga, la acusación no procedió porque la niña no dijo nada en 22 horas de audiencia, situación que calificó de insensible pues no es fácil que una niña hable del abuso que sufrió.

A través de video de colectivas feministas se compartieron videos de la toma de instalaciones de la CNDH.

CNDH aseguró que atenderá demandas

La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) dijo en un comunicado que un grupo de personas llegó a sus instalaciones el 2 de septiembre para exigir demandas de justicia, entre ellas la mamá de Lya.

La Comisión culpó al extitular de la Primera Visitaduría General de la CNDH, José Martínez Cruz, de haber ignorado las demandas de Marcela.

La organización aseguró que, por instrucción de la presidenta, Rosario Piedra, atenderá a las personas manifestantes y dará acompañamiento a sus demandas.

“Por instrucción de la presidenta, personal de la CNDH, dará seguimiento a las demandas de estas personas, reitera su postura de puertas abiertas para todo aquel que acuda a este organismo, ya que su principal propósito, es atender, acompañar y dar respuesta a las víctimas”

CNDH