Ciudad de México.- La magistrada Norma Lucía Piña, considerada por expertos como la favorita para ocupar una de las vacantes en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), compareció esta tarde ante la Comisión de Justicia del Senado de la República. 

Por más de 4 horas, la actual Magistrada de Circuito en el Vigésimo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa dio respuestas breves, y algunas sin un posicionamiento concreto, sobre temas como la legalización de la mariguana, la eutanasia, y las violaciones a derechos humanos por parte de elementos militares.

Fue el senador perredista Armando Ríos Piter quien cuestionó a la magistrada sobre si existe corrupción dentro del máximo tribunal y la percepción negativa de la ciudadanía respecto al Poder Judicial. 

"No puedo hablar de lo que no tengo conocimiento. Pero si las encuestas reflejan corrupción, debe combatirse", indicó Piña Hernández y reconoció que el salario de los magistrados, de 6 millones de pesos al año, es elevado, pero se apega a la independencia judicial.

La magistrada se perfila con ventaja sobre las otras dos integrantes de la terna propuesta por el presidente Enrique Peña Nieto, Verónica Judith Sánchez y Sara Patricia Orea, debido a que ya ha sido contendiente a una vacante en la SCJN. En el 2012 participó en la terna de la que finalmente fue elegido Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.

Piña Hernández es egresada de la Facultad de Derecho de la UNAM. Cursó estudios complementarios en el Instituto Nacional de Ciencias de la Educación en Madrid, España, y cuenta con maestría y doctorado también por la UNAM. 

Otro de los factores que consolidan sus aspiraciones es haberse desempeñado como secretaria de estudio y cuenta de Olga Sánchez Cordero, ministra saliente. 

En cuanto a temas polémicos, Piña Hernández aseguró que ella sí hubiera atraído el caso de amparo de Carmen Aristegui, hubiera mantenido la decisión sobre la francesa Florence Cassez, y hubiera fincado responsabilidades administrativas por la guardería ABC.