La dependencia refirió que recientemente el Índice Nacional de Precios al Consumidor superó 4.0 por ciento anual, límite superior del intervalo de variabilidad previsto por Banco de México (Banxico).
En julio pasado, la inflación general anual en México fue de 4.4 por ciento, segundo mes consecutivo al alza y mayor nivel desde abril de 2010.
Aunque el dato más reciente apunta a que el indicador se vio afectado de manera notable por un alza en los precios agrícolas, la dependencia federal consideró importante mencionar que no se han observado efectos de segundo orden en el proceso de formación de precios.
"Es así que, se considera que el referido aumento es un fenómeno transitorio y sólo de corto plazo sobre la inflación general anual", argumentó en el informe semanal de su vocería.
Señaló que las expectativas tanto del sector privado como público sitúan a la inflación dentro de un intervalo comprendido entre 3.0 y 4.0 por ciento hacia finales de 2012 y durante 2013.
La SCHP afirmó que México cuenta con una economía sólida y con estabilidad de precios, que mantiene la confianza entre los agentes económicos y la cual está sustentada en la responsabilidad con la que se ha aplicado la política económica-fiscal y monetaria.
Para la dependencia, ello permite prever que no habrá un sobresalto que lesione el patrimonio de los mexicanos, a pesar de que existen en el escenario internacional y nacional posibles presiones en la materia.
En la nota informativa titulada "No existen presiones generalizadas sobre los precios en México", expuso que, en los años recientes, México ha continuado con el proceso de convergencia hacia la meta de inflación de 3.0 por ciento.
De acuerdo a Banxico, las expectativas de inflación han permanecido ancladas dentro del intervalo de variabilidad de un punto porcentual alrededor del objetivo permanente de 3.0 por ciento.