México.- Tania Elis Hernández, de 24 años de edad y estudiante de Sociología, participó en las protestas feministas contra la violencia de género en la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán entre marzo y abril pasado; ahora, la UNAM la mantiene como una presa política detenida en el penal de Santiaguito, aislada y siendo víctima de tortura.

A través de redes sociales, colectivas feministas y su familia han expuesto el caso de Elis; en particular, su hermano Omar explicó que la joven fue detenida el 25 de agosto de 2020 en la alcaldía Gustavo A. Madero por policías judiciales; luego la trasladaron a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) en Naucalpan, donde comenzaron las violaciones a sus derechos humanos, y el mismo día, fue ingresada al penal de Santiaguito en Almoloya de Juárez.

“No permitieron que se hiciera presente su representante legal y la mantuvieron incomunicada [...] y hasta el momento se han encargado de mantenerla aislada poniendo trabas a su familia para que no podamos verla”.

Omar Hernández

En el relato de Omar, explicó que tuvieron que pasar dos semanas para que la familia pudiera ver a Elis; además, denunció que la joven ha sido torturada psicológicamente con humillaciones y en contra de su integridad. Directamente, señalan que la FES Acatlán la está usando como ejemplo para reprimir las protestas feministas contra la violencia de género en la UNAM.

Asimismo, desde hace varios días, en Twitter y Facebook han compartido lo ocurrido contra Elis Hernández con el hashtag #LibertadParaElis y retoman que la Universidad sólo ha compartido videos donde se observan a personas provocar un incendio el 5 de abril, pero omiten las agresiones contras las y los estudiantes que protestaban en dicha escuela, en su mayoría mujeres.

Libertad para Elis

A Elis, la UNAM la acusa de haber participado en un incendio que sucedió en las instalaciones de la FES Acatlán el pasado 5 de abril, el delito es vandalismo en pandilla y la Universidad le exige una restitución de daños por un monto de 4 millones de pesos. Compañeros, activistas, feministas y su familia, exigen su libertad.

En su cuenta de Facebook, el hermano de Elis reiteró su petición de justicia y apoyo para evidenciar la violencia de la UNAM contra la joven estudiante; recordaron que siempre ha sido una alumna de excelencia académica, con premios y reconocimientos desde el nivel bachillerato que cursó en el CCH Azcapotzalco.

“Tania se ha mantenido firme a su digna rabia exigiendo que se haga justicia; ella siempre ha luchado por las causas justas. Por eso pido su ayuda a todos los que la conocen y los que no, den a conocer este caso de injusticia que la UNAM FES Acatlán promueve contra sus alumnos por intereses personales del director de dicha institución. Exigimos la libertad pronta de Elis”.

Omar Hernández

También, para exhibir la criminalización contra la joven, la madrugada de este 18 de septiembre, personas que tomaron la entrada de Ciudad Universitaria escribieron mensajes por la libertad de la alumna y las colectivas que tomaron la CNDH en la Ciudad de México, han incluído en sus demandas la libertad de su compañera.

En cuanto a la comunidad de esta Facultad, saben que la denuncia por el delito de vandalismo en pandilla es contra tres estudiantes, incluida Elis, pero han exigido a la dirección del plantel transparentar los detalles del caso que hasta hace poco, no se había hecho público.

Elis y su activismo en la FES Acatlán

Para visibilizar el caso, las colectivas han denunciado que la UNAM está criminalizando el activismo de la joven con esta detención injusta, también refieren que no se ha respetado su derecho a la presunción de inocencia, se le negó contar con un abogado, es víctima de la prisión preventiva oficiosa y del sistema punitivo.

La detención de Elis ocurrió luego de que el pasado 10 de marzo, la colectiva Argüenderas y Revoltosas conformada por estudiantes de la FES, tomaron el cubículo del edificio A-6 como parte de la lucha contra la violencia hacia las mujeres; avisaron que durante la contingencia por el coronavirus Covid-19 mantendrían el espacio como una forma de protesta para que se resuelvan sus demandas.

Luego de casi dos meses con la toma únicamente de ese salón, el domingo 5 de abril, hombres armados ingresaron al plantel, atacaron sexualmente a alumnas que se encontraban en resistencia, golpearon a estudiantes activistas, incendiaron un par de salones y los amenazaron de muerte.

Después, los hombres armados se alejaron en dirección al estacionamiento del plantel y fue entonces que los jóvenes pidieron ayuda a personal de seguridad universitaria. Al salir, las estudiantes se percataron de la presencia patrullas municipales de Naucalpan y estatales, junto al Jefe de Departamento de Vigilancia, Erasmo González Castro, por lo que responsabilizan a la UNAM de ese desalojo violento.