Shanghái (China), 5 ene (EFE).- China baraja prohibir a sus aerolíneas que respeten el sistema de comercio de derechos de emisión de la Unión Europea (ETS, en inglés), que supone hacerles pagar desde 2012 por cada tonelada de dióxido de carbono (CO2) que emitan en rutas con origen o destino en la UE.

La inclusión de la aviación comercial en el ETS entró en vigor el pasado 1 de enero.

Las aerolíneas chinas, que ya habían anunciado que se sumarán a las de Estados Unidos en su denuncia ante los tribunales europeos por obligarles unilateralmente a entrar en el sistema, buscan el respaldo de la Administración de la Aviación Civil de China.

Según publica hoy el diario independiente "South China Morning Post", la entidad reguladora del sector considera la medida "ilegal" y estudia poner en marcha sanciones comerciales contra Europa o incluso prohibir a sus aerolíneas que paguen.

Así lo aseguró el subsecretario general de la Asociación del Transporte Aéreo de China (ATAC), Chai Haibo, cuyo organismo representa a las cuatro mayores aerolíneas del gigante asiático (Air China, China Eastern, China Southern y Hainan Airlines).

La medida de la UE, adoptada por Bruselas en 2008, supone incluir a la aviación comercial desde 2012 en el sistema ETS, ante lo que las tres mayores aerolíneas estadounidenses (American, Continental y United) reaccionaron con una denuncia ante la justicia británica, que a su vez consultó al Tribunal de Justicia de la UE.

Rusia anunció después que prohibirá por ley a sus compañías que paguen esa cuota, y la ATAC China anunció que también llevará el caso a los tribunales, aunque no precisó dónde ni cuándo presentará la denuncia.

La prensa china tampoco lo menciona, aunque Chai dio a entender en declaraciones a medios que la asociación está reuniendo aún apoyo oficial de Pekín para ir a los tribunales.

"Varios departamentos gubernamentales están formulando medidas de represalia a petición de la ATAC y las principales aerolíneas chinas", indicó, aunque admitió que el Gobierno chino aún tiene que decidir si es viable poner en marcha sanciones comerciales contra la UE por este motivo.

A su vez, el portavoz de turno del Ministerio de Asuntos Exteriores chino Hong Lei reiteró hoy, en su rueda de prensa diaria, que "China se opone a que la Unión Europea imponga unilateralmente legislación".

"Esperamos que la parte europea sea prudente y práctica, y lidie con esta cuestión apropiadamente a través de consultas con las partes implicadas, incluida China", añadió Hong.

Lo que establece la nueva norma europea es que tendrán que pagar tasas todas las aerolíneas que al sobrevolar su espacio aéreo superen sus cuotas máximas de emisión de gases de efecto invernadero.

Esas cuotas serán fijadas a partir del volumen de emisiones que se dieron en 2010, de manera que la UE permitirá a las aerolíneas emitir gratuitamente el equivalente al 85 por ciento de los gases expulsados a la atmósfera ese año y les hará pagar por el 15 por ciento restante.

Con sus rutas actuales, las 33 aerolíneas chinas están incluidas en esa lista de compañías aéreas que tienen que pagar a partir de este mes.

La norma europea establece que si una aerolínea se niega a pagar las tasas, la UE le impondrá una multa por un valor de 10 veces el dinero debido, un castigo que, en caso de reincidir, puede llegar hasta la suspensión de permisos de vuelo y la retención de aviones en aeropuertos europeos.

Desde hace meses, la ATAC defiende ante el Gobierno chino que si EEUU, Rusia y China mantienen un frente común contra la medida, difícilmente se podrá llevar a la práctica la inclusión de la aviación comercial en el sistema ETS.