México.- El secretario general del Ayuntamiento de Benito Juárez, Issac Janix Alanis, presentó su renuncia al cargo con “carácter de irrevocable” argumentando que se sentía “indignado” por la represión policiaca que exhibió durante el operativo para ‘contener’ la protesta feminista para visibilizar el feminicidio de Bianca Alexandrina Lorenzana Alvarado en Cancún, Quintana Roo.

A través de un oficio, el funcionario aseveró que la manifestación era una demanda legítima de justicia por cada feminicidio que ocurre en el municipio y destacó que el Mando Único debe ser revisado por el Cabildo Municipal, analizar su efectividad y funcionalidad operativa porque la institución parece operar en contra de la sociedad.

Issac Janix Alanis denunció que mientras la policía asediaba a manifestantes y reporteros a quienes tenía la responsabilidad de proteger, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo fue omisa y nunca se presentó algún perito ministerial en el lugar para registrar los hechos.

El secretario general de Benito Juárez detalla que cuando se unió a la administración municipal lo hizo porque tenía “interés y empeño” en contribuir a mejorar la ciudad de Cancún, lo que no ha venido sucediendo en los cinco meses en su cargo, terminando de convencerlo el operativo implementado durante la protesta el lunes 9 de noviembre por la noche.

El oficio de renuncia que va dirigido a la alcaldesa María Elena Lezama, apunta a “múltiples deficiencias” en la gestión pública municipal cuyo síntoma fue la represión policiaca de un problema mucho más profundo tanto de Quintana Roo como del municipio.

Issac Janix Alanis aseveró que retomará el activismo político desde la oposición: “encuentro que es más fácil contribuir a los objetivo que hace cinco meses anhelaba lograr desde dentro del gobierno municipal, regresando a mi origen”.

La renuncia sucede a la separación del cargo que hizo la alcaldesa del director de Seguridad Pública de Cancún, Eduardo Santamaría, tras afirmar que ella le dio una orden de no desplegar violencia para contener la manifestación feminista en el puerto.