El papa Francisco había cancelado varios eventos y la homilía debido a un resfriado. A propósito del coronavirus Covid-19, su enfermedad y su edad se le realizó una prueba que, por fortuna, ofreció un resultado negativo.

Las cancelaciones en las actividades del papa Francisco como el retiro espiritual fuera de Roma o su nula participación en los ejercicios espirituales de la Cuaresma por su estado de salud, había preocupado al episcopado y a los feligreses por lo que se sometió a la prueba de coronavirus y, de acuerdo al diario ‘Il Messaggero’, ésta salió negativa.

De hecho, el pasado miércoles 26 de febrero el papa Francisco se presentó ya resfriado para celebrar la misa del miércoles de ceniza y para la procesión desde la basílica de Santa Sabina a la Iglesia romana de San Anselmo.

Sin embargo, para los tres días siguiente decidió ausentarse de sus labores en el palacio apostólico permaneciendo en su Residencia de Santa Marta, en el Vaticano.

Esta “renuncia” preocupó a todo el mundo debido al alto contagio y propagación que el coronavirus ha presentado en Italia, causando alrededor de 52 muertes y contagios de más de dos mil personas.

Además, debido a su edad -83 años- se encuentra entre la población vulnerable al Covid-19, además de personas con obesidad e hipertensión. De igual forma preocupa la salud del papa emérito Benedicto XVI quien actualmente tiene 93 años y reside en un monasterio frente a los jardines del Vaticano.