Beirut.- El jefe del principal grupo de oposición sirio que lucha por derrocar al presidente Bashar Assad criticó el martes a Washington por decir que es prematuro hablar de un gobierno sirio de transición, mientras el gobierno de Siria lanzó volantes en los que amenazó a los rebeldes con la muerte si no entregan sus armas.

Varios helicópteros militares arrojaron sobre Damasco y sus alrededores miles de volantes con la amenaza de una "muerte inevitable" si los insurgentes no entregan las armas, como parte de una intensificada ofensiva por recapturar zonas cercanas a la capital.

Los panfletos parecen parte de una guerra psicológica del gobierno contra los rebeldes, pero es muy improbable que tengan algún efecto sobre los combatientes en su campaña por deponer al presidente Bashar Assad.

Algunos de los volantes arrojados el martes, que estaban firmados por las fuerzas armadas y el comando general del ejército decían: "El ejército sirio está determinado a limpiar cada parte de Siria y ustedes tienen solamente dos opciones: Abandonan sus armas ... o enfrentan una muerte inevitable".

De acuerdo con organizaciones de derechos humanos, más de 20.000 personas han muerto en Siria desde que la revuelta comenzó contra Assad en marzo de 2011.

El jefe del principal grupo de oposición, el Consejo Nacional Sirio, criticó a funcionarios estadounidenses por decir que era prematuro hablar de un gobierno provisional.

En declaraciones telefónicas a The Associated Press, Abdelbaset Sieda dijo que la oposición está haciendo preparativos "serios" y consultas para anunciar un gobierno de transición, pero admitió que no es inminente.

El lunes, el presidente francés Francoise Hollande invitó a la oposición siria para que formara un gobierno provisional con la promesa de reconocerlo, pero la declaración de Hollande, al parecer la primera de ese tipo, fue rápidamente descartada por funcionarios estadounidenses, quienes consideraron prematuro hablar de un gobierno provisional cuando la fracturada oposición sirio ni siquiera se ha puesto de acuerdo sobre un plan de transición.

Los funcionarios estadounidenses, que hablaron a condición de guardar el anonimato por no estar autorizados a hablar públicamente del asunto, citaron desacuerdos persistentes entre el Consejo Nacional Sirio y grupos rivales de la oposición y entre las figuras de la oposición siria que hacen campaña fuera del país y los rebeldes que combaten en la primera línea al régimen de Assad.

"Estamos todavía muy lejos de eso", dijo un funcionario.

Sieda reconoció que hay divisiones, pero que son normales en un conflicto como el sirio y que pueden superarse. "La comunidad internacional debe tomar una decisión antes de que sea demasiado tarde", dijo al pedir apoyo para la creación de un gobierno provisional.

Las fuerzas armadas llevan un mes de duros combates contra los rebeldes en la periferia de Damasco y sus suburbios, mientras los enfrentamientos se han estancado en Alepo, la capital comercial y la ciudad más grande de Siria.

El gobierno intensificó recientemente su ofensiva por recapturar los distritos rebeldes en las inmediaciones de la capital. Cientos de personas han muerto en los bombardeos, que se prolongan por varios días.