Sin comer ningún alimento, Zachary Sabin fue obligado a tomar 4 litros de agua en tan sólo 4 horas, acción tras la cual murió. Ryan y Tara, residentes de la localidad de Black Forest, en Estados Unidos, están acusados ahora de haber asesinado a su hijo.

El niño de 11 años perdió la vida luego de haber estado bebiendo y vomitando el líquido, y tras informarle a su padre que le dolían las piernas. En respuesta, este lo pateó, le ordenó que se levantara y lo presionó a meterse en la cama.

Lo obligan a beber 4 litros de agua en 4 horas; muere

A la mañana siguiente, Ryan lo encontró con espuma saliéndole por la boca y sangre en la cama. El hombre llamó a la ambulancia pero los paramédicos no lograron salvar al menor de edad. Los profesionales reportaron que este tenía puesto un pañal que había terminado empapado.

Según las primeras investigaciones, Zachary sufría un problema urológico hereditario que provocaba que se orinara mientras dormía, pero tres semanas antes de su trágica muerte, sus padres notaron que la orina era oscura y comenzaron a obligarlo a tomar un mínimo de dos litros de agua al día.

Una noche antes, Ryan le dijo al niño que la razón por la que regresaba el agua era que bebía lento y eso ocasionaba que se le acumulara aire en el estómago, así que lo forzó a tomársela toda y más rápido. La autopsia determinó que el niño falleció por "intoxicación forzada de agua", pero también presentaba hematomas en la cabeza, brazos y glúteos, así como sangre en las cejas y frente.

Ryan y Tara Sabin actualmente están detenidos y enfrentan cargos de asesinato en primer grado, maltrato infantil con resultado de muerte y otros seis cargos menores por maltrato infantil. La policía sospecha que otros cinco hijos de la pareja también fueron víctimas de violencia.