Dorian”, el huracán que dejó una estela de destrucción en las Bahamas, impactó finalmente los Estados Unidos este viernes, llevando vientos y fuertes lluvias a Carolina del Norte.

La tormenta impacto los Bancos Externos del estado, una serie de islas en la costa de la masa continental, lo que dejó atrapadas a varias personas en las mismas.

La isla de Ocracoke, la cual únicamente es accesible por bote o por via aérea, registró varias personas atrapadas, mismas que buscaron refugio en los áticos de sus casas con el fin de evitar el agua que inundó los pisos inferiores.

Roy Cooper, gobernador del estado, señaló su preocupación por lo que se calcula son cientos de personas atrapadas dentro de la isla.

Por este motivo, se desplegaron a miembros de la Guardia Nacional norteamericana para evacuar y llevar agua y alimentos a residentes de esta isla y otra cercana, llamada Hatteras.

Se reporta que en la isla de Ocracoke, las aguas se elevaron a una altura de casi dos metros, en espacio de hora y media de precipitaciones.

Residentes de la isla señalan que se trata de la mayor inundación que han presenciado desde que tienen memoria.

En las Bahamas, la situación sigue deteriorándose tras el paso del huracán el pasado fin de semana.

Se calcula que han fallecido al menos 30 personas, con muchas más desaparecidas y miles de personas que han perdido sus hogares ante el enorme poder destructivo de la tormenta.