El manga, el fan-service y la representación de las mujeres está de nueva cuenta en el ojo público debido a una petición lanzada en Change.org, donde se pide a las editoriales que advierta y hagan una distinción entre "contenido erótico" y "violencia sexual" en obras como 'Dragon Ball' y 'One Piece'.

El señalamiento fue hecho por el joven japonés Manabu Sekiguchi, quien señaló que estas y otras publicaciones no hacen una distinción clara en esos puntos; además de que están al alcance de los niños, quienes no comprenden muy bien la naturaleza de dichas escenas.

Para muestra señala que él cuando estaba en la primaria tuvo acceso al manga 'To Love Ru', el cual tenía una alta dosis de fan-service, donde las protagonistas aparecían en ropa interior, semidesnudas o sufrían de alguna clase de "acoso en broma".

Menciona que ha notado que en varias historias no hay un consentimiento para este tipo de acciones por parte de los personajes, y que no importa si quienes acosan son mujeres (ya sea a otras mujeres o a hombres), es la acción la que está mal, cosa que no cambia no importando el género.

Nami

Cree que se refuerza el estereotipo de las mujeres como presa

Sekiguchi añade que el uso indiscriminado del fan-service en mangas sólo contribuye a reforzar el estereotipo de las mujeres como presa y el hombre como "lobo", que sólo mira al género femenino como un objeto sexual, sin importar sus sentimientos.

Aún más, considera que el tener personajes menores de edad o con apariencia infantil, sexualmente atractivos, también es un problema; pues aunque se quiera señalar que es fácil distinguir entre la ficción y lo real, un niño (como era su caso) no puede hacer esa disociación de manera tan evidente.

Maestro Roshi

Se menciona a 'Dragon Ball' y 'One Piece' porque son las obras más famosas y que recurren a este tipo de escenas de fan-service sexual. En el caso del segundo, es Nami quien es puesta en este tipo de situaciones, que a consideración de muchos son gratuitas, pues no aportan nada a la trama y son tratadas como simples "bromas".

Mientras que en la obra de Akira Toriyama, es el Maestro Roshi quien es blanco de los señalamientos, pues el viejo constantemente busca la manera de tocar a las protagonistas sin su consentimiento, de nueva cuenta a manera de "chiste", pues no hay consecuencias reales, ya que las agredidas mantienen su amistad con el maestro.

Con información de Anime News Network.