Conocida como princesa Ayako, la hija de un primo del emperador de Japón acaba de perder su título nobiliario tras casarse con Kei Moriya, un empleado de la compañía de transporte marítimo sin ninguna relación con la nobleza.

La ahora ciudadana común de 28 años, acudió a la ceremonia, sin embargo, con un atuendo tradicional de la corte imperial del país. Su enamorado la esperaba en el santuario Meiji de la capital nipona para colocarle el anillo, leer los votos y comprometerse de manera legal. 

"Quiero que trabajemos juntos, tomados de la mano, para crear una familia llena de sonrisas", le dijo. Ayako, por su parte, se despidió del emperador Akihito en muestra de su amor, aunque espera seguir apoyándolo en calidad de exmiembro de la familia imperial.

Foto: Tomada de AP.