Este video te hará el día. Este perrito llamado Sam, está acostumbrado a visitar la tienda local de mascotas; donde probablemente su dueña, le compra algunos premios como galletas.

Resulta que en uno de esos paseos nocturnos, Sam decidió postrarse frente a las puertas de la tienda y por más que su dueña le explicó que pasaban de las once de la noche y que estaba cerrada, éste se encaprichó y se negó a moverse.  ¿Qué te parece?