No hace falta ser un genio para saber que la mayoría de personas de gran inteligencia suelen ser socialmente torpes en algunos aspectos, la mayoría de las personas no se dan que no son "idiotas" o cualquier estereotipo en el que se les encasille; sino más bien, es porque las personas muy inteligentes ven el mundo en un nivel completamente diferente al resto de nosotros. Debido a esto, los científicos consideran que aquellas personas que padecen ansiedad en situaciones normales, que no saben cómo desenvolverse en fiestas o reuniones sociales, son más inteligentes, ésto a que constantemente su mente trabaja a toda velocidad y los vuelve seres preocupados por todo lo que les rodea.

Aquí 5 puntos que los científicos destacaron sobre las persoas ansiosas:

1. Tienen una gran inteligencia centinela

Las personas altamente inteligentes están mucho más en sintonía con el mundo que les rodea que la mayoría de los individuos. Son muy sensibles a las amenazas de todo tipo, hasta el punto de que tienen dificultades para relajarse. Los ruidos fuertes repentinos pueden ser suficientes para hacerlos entrar en pánico. Son tan rápidos que, si bien todo el mundo está procesando el ruido que acabamos de escuchar, ellos piensan si fue un balazo, una bomba o un cuete. Su ciclo de pensamiento es veloz.

2. Son muy conscientes de sí mismos

Las personas inteligentes están constantemente pensando en cómo están siendo percibidos, y cambiarán su comportamiento cuando estén en un lugar público para tratar de armonizar tanto como sea posible. Están constantemente plagados de pensamientos como "¿Qué pasaría si todo el mundo me ve estornudar? Todos se reirán de mi" Mientras que las personas pueden haber visto que suceda, lo más probable es que no les importe lo suficiente como para hacer  gran cosa al respecto. Por extraño que parezca, es difícil para la gente inteligente darse cuenta de que la mayor parte de sus pensamientos están y ocurren sólo en su cabeza.

3. Analizan en exceso los eventos

Las personas altamente inteligentes buscan constantemente el significado más profundo en las conversaciones y sucesos de la vida regular. Esto puede llevar a que se pierdan en su propia línea de pensamientos y perder su lugar en la conversación. Ellos analizan las cosas en exceso y se distancian de las conversaciones principales, resultando mejor ser un observador externo que participar activamente en las interacciones con poco valor nominal.

4. Sobre-analizan las palabras

Las personas inteligentes se están constantemente preguntando "¿Qué quiso decir con eso?" Esto puede causar ansiedad social en la más inocua de las situaciones.

5. Son empáticos

Además de ser muy sensibles a la forma en la que otras personas se presentan, las personas muy inteligentes también son muy empáticas.Desafortunadamente, esto les lleva a asumir las cargas y los problemas como propios (aunque no tengan nada que ver). Ya que sobre analizan cada situación, buscan solucionar absolutamente todo o al menos saber que lo intentaron. Cuidan a las personas profundamente.