Adele, que acaba de arrancar su gira, se dio tiempo para visitar a una fan de 12 años de edad que desafortunadamente morirá en cualquier momento. 

La chica en cuestión se llama Rebecca Gibney, es ciega y tiene parálisis cerebral. Su médico le dio seis meses de vida a partir de diciembre de 2015. 

Tracy, madre de la menor, lanzó una campaña en Facebook explicando que su hija no puede caminar ni hablar, que se alimenta por sonda, y su único deseo era conocer a Adele, ya sea hablar con ella por FaceTime o recibir un mensaje grabado en video. 

La petición llegó a oídos de la cantante y decidió visitar a su pequeña fan en su casa en Belfast al Norte de Irlanda. 

Tracy contó a Belfast Telegraph que la británica tomó la mano de su hija, jugó con su pelo y pasaron un momento increíble, una visita que nunca olvidará y que agradece infinitamente pues sabe que cuando muera Rebecca se irá con la felicidad de haber cumplido su sueño.