Dentro de la cinematográfica existe un "género" (por así decirlo), conocido como la Serie B; se tratan de películas de bajo presupuesto cuyo único fin es llamar la atención por todos los medios posibles, con tramas por demás exageradas que explotan todos los clichés que puedan ser explotados. Aunque suena a lo peor que pueda haber en cine; la realidad es que nos ha dado grandes clásicos como "La Tiendita del Horror", "Chucky", "Pink Flamingos", e incluso la tan criticada "Sharknado", así como una buena parte de la obra de Quentin Tarantino y Robert Rodriguez.
Así llegamos a "Operación Overlord", dirigida por Julius Avary y producida por J. J. Abrams; la cual, en un giro curioso, se vale de un gran presupuesto para traernos una obra digna de cine categoría B.
El hilo narrativo es por demás básico; estamos en la Segunda Guerra Mundial, a unas horas del desembarco en Normandía; un grupo de soldados en enviado tras la líneas alemanas con el fin de destruir un punto clave que impediría la gran incursión aliada; sin embargo, además de una gran armada Nazi, nuestros héroes deberán de hacer frente a un grupo de seres sobrenaturales.
Bajo esta premisa es que la película no pierde tiempo en presentarnos grandes argumentos narrativos, todo es directo; de un lado están los héroes, del otro los villanos, y el resto son minutos con ráfagas de plomo, explosiones y sangre de "súpersoldado" al por mayor.
Como podrás imaginar, no hay un trasfondo real de los personajes, todos cayendo en los estereotipos clásicos del género; tenemos al soldado con humor ácido que tiene buen corazón, el siempre recto y moral, el misterioso, el científico loco, la chica linda y ruda, y claro, el malo que es malo, pues porque debe de haber un malo. No obstante, todo funciona de muy buena manera, dando un gran espectáculo de entretenimiento puro sin mayor pretensión.
Esa es sin lugar a dudas la mayor virtud de Operación Overlord, que no busca nada más que entretener al público; lo cual logra sin mayor problema, uno sale con una sensación agradable de la sala al haber visto una película divertida. Asimismo, a su favor también está su buen manejo del ritmo, sobretodo tomando en cuenta que dura poco menos de dos horas; sin olvidar su buen manejo de los efectos especiales, en su mayoría prácticos, manteniendo ese espíritu Serie B que les comentábamos al inicio.
Para aquellos que sean fans de los videojuegos, imaginen que el filme es un live-action no autorizado de Call of Duty: Nazi Zombies, donde la trama y la justificación de todo es lo de menos, lo que importa es la acción directa en contra de los muertos vivientes. Aquí sucede exactamente lo mismo.
Si estas buscando un trabajo serie, cuasi histórico de lo que fue la Segunda Guerra Mundial, como Dunkirk o Salvando al Soldado Ryan; te advertimos que estás en el lugar equivocado y con muchas probabilidades de salir decepcionado. Por el contrario, si quieres desconectarte un rato de la realidad y ver acción en su máxima expresión; Operación Overlord, con sus exageraciones y clichés, es para ti.